Con frecuencia, las empresas que desean cubrir una vacante llevan a cabo un proceso de reclutamiento y selección de personal hasta llegar a la contratación. Los test o pruebas psicométricas son parte de dicho proceso.
Estos test evalúan, a través de una serie de preguntas o ejercicios, aptitudes del razonamiento en diferentes ámbitos: lógico (series de números, letras, figuras, dominós, monedas), verbal (vocabulario, fluidez verbal, ortografía, sinónimos y antónimos), numérico (operaciones de cálculo), espacial y mecánico (poleas y palancas).También valoran la capacidad de memoria (retención visual, auditiva), atención, percepción, inteligencia, aptitudes psicomotrices, creatividad, destrezas y habilidades particulares.
Las pruebas psicométricas son una herramienta indispensable en el ámbito de los recursos humanos, no sólo para la selección de personal sino también para efectuar cambios de puesto y/o movilidad interna ya que sus resultados permiten elegir al mejor candidato o al que más se adecúa a un perfil determinado.
Además, sirven de gran apoyo a psicólogos y psiquiatras para la evaluación de aspectos clínicos de la personalidad como la extroversión, introversión, impulsividad, reflexividad, dependencia e independencia.
El material que constituye estas pruebas está tipificado, es decir, permite obtener siempre una interpretación estadística a partir de un resultado numérico mediante el uso de tablas normativas de población, sin entrar en valoraciones morales o éticas. Sin embargo, hay que tener en cuenta que la interpretación es casi siempre relativa y que existen factores como el cansancio, el estrés de la persona que lo realiza, la predisposición o la iluminación de la sala, que pueden alterar sensiblemente los resultados de la prueba.
Existen cuatro grandes grupos de pruebas laborales: los proyectivos, los de aptitudes, los de nivel y los de personalidad. Los primeros buscan predecir el comportamiento futuro de una persona; revelan los aspectos más escondidos de la personalidad. Los de aptitudes valoran los requisitos específicos del candidato para un determinado puesto. Los de nivel evalúan el nivel intelectual del candidato. Y los de personalidad miden características personales del candidato.
El principal factor a tener en cuenta en la realización de los tests psicométricos es el tiempo, pues, generalmente, la prueba está pensada para que no dé tiempo de terminarse, así que lo mejor es ocuparse de contestar correctamente al mayor número de preguntas posibles.
Las pruebas que miden aptitudes no requieren de gran dificultad y la clave para superarlas es la práctica.
Además, es muy importante descansar, dormir bien, dejar los nervios en casa, leer con atención las instrucciones, preguntas y alternativas de respuesta, aclarar dudas antes de comenzar, no precipitarse ni contestar al azar, continuar la prueba puesto que a veces las preguntas más fáciles están al final, contestar a las preguntas con sinceridad, responder siendo uno mismo los test de personalidad, y evitar marcar respuestas de indecisión.
*Analista.
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