TURICATO, Mich.- El presidente municipal Salvador Barrera Medrano señaló que la seguridad policiaca asignada a la comunidad religiosa de La Ermita no es garantía de tranquilidad social, indicando que los ánimos pueden desbordarse con mayor energía.
Entrevistado por este medio electrónico, el alcalde de Turicato manifestó que “se están realizando esfuerzos por la administración municipal y del gobierno estatal para sentar a las partes en conflicto y dialogar, pero los enconos al interior de La Nueva Jerusalén no lo permiten”. Dijo que se ha instalado una caseta policiaca en la comunidad religiosa donde se han suscitado graves daños a la tranquilidad social y a la infraestructura educativa, pero, expuso, “eso no garantiza salvarguardar la paz social y se pueden desbordar los ánimos entre los grupos en pugna, uno de ellos en franca actitud de cerrazón para la conciliación”.El edil Salvador Barrera Medrano puntualizó que el restablecimiento del orden constitucional es básico para garantizar los derechos de los habitantes de La Ermita, exhortando a las partes en conflicto a mantener la prudencia y acudir a la negociación civilizada, antes de poder presenciar situaciones más complicadas.