19 enero, 2025
ROTATIVO DIGITAL

NOS DOMINABA UN DESEO COMPULSIVO DE DISFRUTAR LA VIDA COMO ANTES

Bill W.

Para la mayoría de las personas normales, el alcohol es sinónimo de convivencia, de camaradería y de sueños dichosos y coloridos. Tomar una copa los libera del fastidio y de la preocupación.

Es la intimidad gozosa con los amigos y la sensación de que la vida es hermosa. Mas no fue así en los últimos días de nuestro exagerado consumo. Los placeres de ayer se habían desvanecido.

Ya no eran más que recuerdos.

Nunca jamás pudimos revivir los momentos de intensa alegría del pasado.

Nos dominaba un deseo compulsivo de disfrutar la vida como antes y estábamos obsesionados por el pensamiento de que, gracias a un renovado milagro, pudiésemos retomar el control de nosotros mismos y cumplir ese deseo. Sin embargo, cada nuevo intento desembocaba en un fracaso.

📖 Cap: LA VIDA QUE NOS ESPERA

REDACCION