Cuando era un niño, para estudiar, tenía que recorrer grandes distancias caminando junto a mis hermanos para poder llegar desde Santa Cruz de Morelos, mi comunidad, hasta Tacámbaro; y estoy hablando de caminar (no había carreteras ni transporte) entre 12 y 14 horas continuas cada 15 días para poder ir a la escuela con el sueño y la ilusión que tiene un niño de un día ser importante.
Tiempo después, me nació el interés por involucrarme en la lucha social y, una vez que empecé a ejercer mi derecho a votar, se acrecentó mi inquietud de dar seguimiento a las diferentes administraciones indistintamente al partido que pertenecieron en los últimos 20 años en mi municipio: Turicato.Este municipio ha tenido la mala suerte de haber sido gobernado por cacicazgos políticos en el pasado que no permitieren su desarrollo; que se caracterizaron para llevar una vida de dispendio, enriquecerse o consolidar grupos políticos voraces y peligrosos.
En los 80 años como municipio, pocos han sido los gobiernos que se han preocupado por fortalecer líneas de trabajo, encaminadas a llevar a cabo obras y acciones que hayan impactado positivamente en la vida de la gente y transformado a las comunidades, y digo pocos, porque la mayoría no aguantó la tentación de sesgar la aplicación de recursos públicos para beneficio personal y de eso existen ejemplos muy ilustrativos que ya analizaremos en otro momento.
Quizás desde el momento en que surgió la alternancia en el poder municipal derivada de la aparición del PRD como fuerza política competitiva, empezó a surgir la necesidad de trabajar con un poco de mayor responsabilidad; comprobado está que donde hay competencia en el caso de las empresas, las ofertas son mejores y más baratas; guardadas las proporciones, en el servicio público los servicios y la atención son mucho mejores; bajo este esquema los únicos que salen ganando son los ciudadanos.
Con el arribo del PRD a la presidencia y la convicción de que el PRI ya no era útil ni tampoco invencible, el pueblo pudo establecer parámetros de comparación y emitir juicios mucho mas razonados en función del desempeño de sus presidentes.
Así, los ciudadanos tienen su propia lectura y saben, hoy en día, lo que les conviene en el futuro, es decir se han transformado en entes analíticos y más politizados.
No obstante, todavía hay quienes creen que un buen presidente es el que regala apoyos de manera discrecional y personalizada, nada más lejos de la verdad; un buen presidente es el que mediante un buen diagnóstico planea y ejecuta obras de beneficio colectivo que generen desarrollo, como recientemente está sucediendo con la actual administración en Turicato que, durante el 2012, ejecutó 100 obras de infraestructura, entre caminos, calles, drenajes, electrificaciones, escuelas, clínica, entre otros.
La pavimentación del eje carretero que comunica a toda la región sur con su cabecera municipal ya es una realidad; desde finales del año pasado la compañía encargada de la obra se encuentra trabajando duro; un buen número de equipos de maquinaria pesada están desplegados a lo largo del tramo El Zapote-Las Ceibas, donde ya lleva un buen avance, gracias a las gestiones que ha logrado materializar el actual presidente municipal Salvador Barrera Medrano ante instancias estatales y federales.
Esto era justo lo que estaba esperando el pueblo de Turicato por décadas. El avance que se está viendo ahora es motivante para muchos ciudadanos que viven fuera y vienen a visitar a sus familias en tiempos de vacaciones; simplemente no pueden creer lo que esta sucediéndole a Turicato, al llegar a su comunidad la encuentran transformada, con un mejor camino de acceso o una nueva plaza, cancha, clínica o escuela.
En apoyo a la ganadería, la infraestructura hidráulica es una línea de trabajo que se verá fortalecida en este año con la proyección de 5 presas que se construirán para beneficiar al mismo número de regiones que han sido castigadas fuertemente durante décadas por sequias recurrentes, principalmente en tiempos de estiaje cuando no hay agua ni para consumo humano; ya ni decir de la agricultura y ganadería, donde se generan muchas pérdidas por falta del vital liquido.
Para el fortalecimiento del sector agrícola, por gestión del presidente ha llegado un KIT de 10 máquinas que permanecerán por 4 meses en el municipio construyendo bordos, caminos saca-cosechas, así como limpieza y destronque de parcelas.
Las bondades y ventajas de este programa son muchas porque al usuario únicamente le costará el combustible y cada campesino podrá disponer hasta por 3 días de un equipo, tiempo suficiente para que los labriegos turicatenses mejoren sus condiciones de trabajo y puedan tener una mejor utilidad de sus actividades.
Sistemáticamente desde mediados del año pasado, cada semana se están entregando obras terminadas, en ocasiones hasta 2 por semana; lo que nos indica el ritmo de trabajo que se ha imprimido en la dirección de Obras Públicas y otras áreas operativas y administrativas de la municipalidad.
No son pocos los escépticos que han terminado por convencerse del trabajo que se está haciendo desde la presidencia, al ponderar la necesidad social por encima de colores partidistas.
Más allá de lo que se pueda decir a través de los medios, los hechos no dejan mentir a nadie. La percepción ciudadana en casi todas las comunidades son de aceptación por los logros alcanzados en tan poco tiempo, a pesar de los problemas financieros que han castigado al municipio, derivados de ajustes presupuestales del gobierno estatal el año pasado.
Además de aulas, también se están realizando otras acciones de fortalecimiento al rubro educativo. Derivado de la marginación de algunas comunidades, el presidente municipal implementó un programa de apoyo con combustible para traslado de estudiantes hasta su centro educativo y su retorno a casa.
Lo mismo viene sucediendo desde hace tiempo con los estudiantes de nivel superior que semana tras semana el municipio traslada a la ciudad de Morelia en un camión municipal; alumnos turicatenses que cursan diferentes carreras de licenciatura en la Universidad Michoacana.
Estas acciones fortalecen la educación, porque facilitan que nuestros jóvenes de escasos recursos puedan continuar con su preparación profesional.
No es cosa menor los 1300 pisos firmes que en coordinación con la SEDESOL se operaron en el municipio durante el 2012, además de cientos de acciones relacionadas con entrega de láminas galvanizadas, cemento y otros pétreos para construcción de muros o tejados; el programa social de vivienda que es compartido entre municipio y beneficiarios está fortaleciendo de manera importante el rezago en el rubro; varias fincas se han construido bajo este esquema.
Mención aparte merece el programa de reforestación que se sigue aterrizando en la parte serrana del municipio con la reciente plantación de 10,000 pinos.
A diferencia de cuando era un niño, ahora ya existen políticas de gobierno para impulsar la educación en Turicato; y al igual que en Santa Cruz, en otras comunidades ya tienen escuela de nivel básico y medio superior, razón por la que ya cuenta con varios profesionistas que fueron alumnos de muchas escuelas rurales. Esto simplemente se llama DESARROLLO…