26 julio, 2024
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Atentado cultural en Tzintzuntzan

Esta vez me quiero ocupar de dos asuntos que tienen lugar en el entorno de Pátzcuaro, uno positivo y el otro negativo. Empecemos por el positivo: el próximo sábado 28 de julio se cumplirán quince años de la conformación del Grupo K’uanískuiarani de Estudiosos del Pueblo Purépecha, cuyos miembros desde el 19 de julio de 1997 se vienen reuniendo cada dos meses en el centro cultural Antiguo Colegio Jesuita de Pátzcuaro, para intercambiar información sobre los más diversos aspectos de la cultura purépecha.

El asunto negativo es el siguiente: sobre una de las plataformas prehispánicas de la zona arqueológica de Tzintzuntzan, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) construye un megamuseo, en una acción que rompe con los esquemas institucionales y legales establecidos: se trata de un acto autoritario de la dirección general del INAH, a cargo de Alfonso de María y Campos, que pasa por encima de las responsabilidades del Centro INAH de Michoacán y sobre todo contrariando la ley que en teoría protege a todo centro arqueológico del país para evitar precisamente ese tipo de atentados.

Sin duda contrastan ambos eventos. Mientras el Grupo de Estudiosos del Pueblo Purépecha se creó por la necesidad de profundizar en los secretos que guarda la cultura purépecha, el megamuseo de Tzintzuntzan que intenta imponer la dirección general del INAH a los michoacanos, es una falta de respecto a esa cultura, pues con él se “destruye y adultera el significado histórico-natural de zona de monumentos tan emblemáticos para la historia y cultura purépecha…”

En aquellos lejanos años entrevisté a uno de los promotores-fundadores del Grupo K’uanís (como también se le conoce), Carlos García Mora, para conocer las razones en que se funda la constitución de este grupo de académicos, destinadas a darse a conocer en la página Web del Ex Colegio Jesuita. Lo siguiente es parte de lo que me comunicó:

“Uno de los problemas científicos más relevantes de la mesoamericanología ha sido el llamado “problema tarasco”. La peculiar inserción del pueblo tarasco, en la actualidad conocido como purépecha, del estado de Michoacán, México, en el proceso civilizatorio, al cual fue el último en incorporarse, ha planteado problemas históricos y antropológicos todavía sin resolver. Por supuesto, la cuestión sobre su origen ha sido uno de los más vistosos, dada la enorme ignorancia que al respecto existe y la todavía lejana posibilidad de que pueda ser superada.

“De ahí que la lengua tarasca siga siendo una de las más grandes incógnitas de lingüística histórica en la mesoamericanología. Si bien en los años cuarenta del siglo pasado hubo un auge notable de la purepechología, después decreció el interés y se dispersaron los esfuerzos. Sin embargo, en la actualidad se ha renovado notablemente el interés sobre estos estudios, a tal punto que si logran conjugarse esfuerzos podría producirse un nuevo auge, con la ventaja de que ahora existen muchos más investigadores activos que en esos años…”

Bueno, pues a contrapelo de esos agradecibles propósitos, el megamuseo de Tzintzuntzan ha venido a destruir en su construcción evidencias prehispánicas, cuando lo explorado en esa zona arqueológica por falta de presupuesto apenas alcanza el 15 por ciento de su superficie, de acuerdo con la información que da el arqueólogo Efraín Cárdenas García, amplio conocedor de la misma.

Fueron precisamente él y el arqueólogo Arturo Oliveros, quieren dieron la primera voz de alarma sobre el atentado que se está consumando en la zona arqueológica de Tzintzuntzan. Del reportaje de Carmen García Bermejo (El Financiero, 29/06/2012), retomo la acusación que ellos hacen: “los funcionarios del INAH autorizaron la construcción de un megamuseo de sitio sobre una de las plataformas piramidales, justo en el corazón de la cultura purépecha… Con la edificación de este mall turístico se atenta contra uno de los centros ceremoniales más importantes del occidente mexicano”.

Ambos arqueólogos han trabajado durante más de 20 años en la cuenca de Pátzcuaro, así que con todo conocimiento de causa demandan al director general del INAH, Alfonso de María y Campos, suspender y reubicar la construcción del magno museo. Así explica el caso el arqueólogo Arturo Oliveros: Desde 2009 se ocupa del mantenimiento de la zona arqueológica de Tzintzuntzan; en 2011 solicitó su año sabático. A su regreso en 2012 se entera del Proyecto Especial Michoacán no porque alguien se lo haya comunicado de manera oficial, sino por la casualidad de que tuvo que acudir a Tzintzuntzan a acompañar a una personalidad nacional de las letras a hacer el recorrido por esa zona arqueológica. El Centro INAH Michoacán había sido pasado por alto por la dirección general de ese organismo federal.

Especialistas del INAH han entrado al quite para salvar la zona arqueológica de Tzintzuntzan, del atentado que significa la construcción del megamuseo. En desplegado de la asamblea general de profesores-investigadores del INAH, dirigido al pueblo de México y al secretario de Educación, José Ángel Córdova Villalobos (Reforma, 19/07/2012), acusan al director general del INAH, Alfonso de María y Campos, de agudizar la política neoliberal en esa institución, con la anuencia de los titulares de la SEP y de la presidencia de la República; dicha política se ha manifestado en la eliminación del carácter social del INAH y de los bienes nacionales arqueológicos e históricos, “que son de uso común y dominio público, fuentes primigenias del conocimiento de nuestras historias, así como fundamento de los orgullos locales, regionales y nacionales, para ubicarlos como mercancías al mejor postor y favorecer a las empresas del espectáculo y del turismo de élite… “

Los profesores-investigadores del INAH piden parar de inmediato la construcción del megamuseo de Tzintzuntzan; asimismo exigen la destitución del director general Alfonso de María y Campos, de la Coordinadora Nacional de Arqueología, Nelly Robles García, así como de coordinadores y directores de centros-INAH que han violentado la Ley Orgánica y la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos. En el desplegado también se ocupan de la problemática que enfrentan los fuertes de Loreto y Guadalupe en la ciudad de Puebla.

Sin lugar a dudas la fiesta del 15 aniversario de los purepechólogos tendrá un tema adicional polémico. A los interesados les recomiendo visitar la dirección: http://investigadoresinah.org.mx/feed/, en la que encontrarán suficiente información de texto y gráfica para indignarse lo necesario, sobre todo cuando los atentados a la historia y a la cultura nacionales vienen desde dentro de las propias instituciones; no por cierto de parte de los conocedores de la materia institucional, los expertos, sino de la clase política que llega a “dirigirlas”.