Lic. Alfredo Castañeda Flores ANALISTA
12 julio 2025.-Nadie quiere ser un idiota, ni nada negativo, por lo mismo, nadie se cree que es manipulado por el orden mundial o sistema político de cada país. Como siempre me referiré a nuestro país. Aunque eso es a nivel internacional.
Comenzaré sin seguir ningún ordenamiento, porque cualquier cosa que se te venga a la mente, inteligente lector, es manipulación pura. Nada es fortuito en el mundo, mucho menos en México.
Cualquier movimiento social que te imagines es propiciado por el gobierno, en cualquiera de sus tres niveles, federal, estatal y municipal, sean del mismo partido, ideología o contrarios (oposición), asimismo, de un grupo o corriente de lo mismo, para desestabilizar y lograr prebendas, canonjías y beneficios para los demás integrantes, para lo cual utilizan a diversos sectores sociales, preferentemente de los niveles más bajos, para lograr lo que desea, promoviéndolos por y con dinero, que es lo que mueve al mundo.
Decía Carlos Hank González que nadie se resiste a un cañonazo de un millón de pesos, ahora hasta con menos, cualquier seudo dirigente que mal llaman líder se presta a reunir un grupo de gente y llevar a cabo una protesta, cerrar una arteria vial, gritar consignas, hasta vandalizar oficinas y negocios que le toca a su paso, rumbo a donde tengan que ir. Por eso es que pocas veces detienen a alguien y si lo hacen, no es procesado, mucho menos sentenciado, por los destrozos a la población y a los bienes de la Nación. Ya que, si lo hicieran, el mexicano mayoritariamente es cobarde y de inmediato echarían de cabeza a quien los buscó y así sucesivamente en efecto dominó hasta llegar al grupo o político que está detrás de eso.
Aunque el gobierno sí lo sabe. Dicen, entre gitanos no se leen la mano, y previamente ya hay amenazas o como se dice, valores entendidos, es decir, se ponen de acuerdo para X o Y situación, que les sirva para distraer la atención de la población y los medios de comunicación, afines, se prestan de inmediato para desviar los reflectores, haciendo grande algo que no tiene ni pies ni cabeza, pero que, en nuestro país, resulta de impacto mediático para olvidar lo importante. Eso está más que claro para quien tiene cierta materia gris, para quien analiza, razona y reflexiona, que son una minoría.
Otra característica de tal manipulación es crear polémica, para eso hasta en los deportes se observa, porque el gobierno tiene injerencia en TODO, en épocas del futbol, los torneos los gana el equipo que tiene más seguidores a nivel nacional, cuando es algo grande que se les está saliendo de control o un equipo local, cuando está sucediendo en determinado estado, región o zona, eso sí, sembrando la polémica de un penalti mal marcado, un gol en fuera de lugar, una expulsión perdonada, etcétera, para que la gente se siga atacando y defendiendo con eso, lo mismo pasa con los sucesos sociales, sean violentos o no, aunque los que conllevan sangre, lágrimas y muerte, son más impactantes y perduran durante mucho tiempo, aunque tengan los cuerpos y la certeza de que las víctimas son los familiares que están buscando, fingen que no lo son, para seguir año con año, dicen ellos, buscándolos, aunque ya hayan sido entregados y enterrados con el menor sigilo, comprometidos durante el resto de su vida, a no sacar a la luz, la verdad, verdadera. Eso sin contar que muchos de esos casos son inventos, tanto del gobierno, como de los presuntos familiares. Y otros, peores son provocados por el mismo gobierno y sus testaferros. Hay una máxima política, tan vigente como real que dice: “““…Una muerte se justifica cuando resuelve un problema…”””
De no creerse, ¿verdad? Pero es completamente cierto, amable lector, el gobierno tiene el control total del país, y en cualquier momento que lo requiera, echa mano de la información que posee para manipular a su antojo a la oposición, a los empresarios, periodistas, a quienes tienen cierto nivel de persuasión, y que los puede desestabilizar, por eso es que mientras les conviene, los tienen tranquilizados, lanzando peroratas y verborrea sin mucho sentido solo para seguir con los reflectores, porque aunque TODOS los políticos son iguales de corruptos, ladrones, incapaces y demás, solo se persigue a los que están del lado opuesto al partido que gobierne, a nivel federal, el país. Lo mismo pasa, aunque guardando las debidas proporciones, en los estados y municipios.
Sinceramente, nada de lo hasta aquí señalado, ¿te resulta conocido? Tengo la certeza que sí, o por lo menos lo ves aplicado a otro suceso del que hayas sabido.
Si dudas de lo aquí mostrado, pon atención a lo que ocurre, justo cuando hay un evento que perjudica al gobierno en cualquiera de los niveles, y te darás cuenta que fortuitamente surge algo que desvía la atención de los medios, radio, TV y redes sociales y no necesariamente tiene que ver con lo mismo, puede ser de cualquier tipo, farándula, deportes, socialité, empresarios, educación, movimientos minoristas, colectivos homosexuales y lesbianas, feministas, madres buscadoras, los 43 de Ayotzinapa, mineros, electricistas, telefonistas, magisterio, etcétera, etcétera. Pero pocas veces, propiciado por la oposición, porque quien tiene todo el dinero público a su servicio, es el partido gobernante y salvo honrosas excepciones, solo un tonto, gastaría su propio dinero, buscando tambalear a algún alcalde, gobernador o presidente. Esos son otros niveles, que en nuestro país no encontramos.
México es experto en crear figuras mediáticas momentáneas y desaparecerlas a conveniencia, hacer brillar figuras de todo tipo, surgidas de la nada y sin talento alguno, pero con la fuerza de los medios afines al gobierno, que a la mayoría deslumbra, sin darse cuenta que todo eso es un vil engaño, una mentira que solo tiene como finalidad esconder algo que no les conviene que la mayoría de la población se entere. Eso, es simple manipulación. Así vivimos, así hemos estado siempre, no es algo reciente, desde que somos conscientes, nos han preparado para no darse cuenta de la realidad, para no cuestionar, para no razonar, para no protestar, para quedarse callados, asintiendo todo lo que ellos quieren que creamos, que hagamos, que digamos. Y la mayoría eso hace. Triste realidad nacional.