8 marzo, 2025
ROTATIVO DIGITAL

Trabajo y desempleo…

Lic. Alfredo Castañeda Flores       ANALISTA

28 ENERO 2023.-Una de las principales demandas de cualquier rincón de nuestro país es el empleo, el trabajo, la gente todo el tiempo miente en sus cualidades, capacidades, actitudes y aptitudes. Está claro que la mano de obra nacional para nada está calificada, son los que dejan cualquier grado de escolaridad trunco, en su mayoría, el nivel básico, primario y secundario.

 

Tanto a hombres como mujeres se les hace fácil dejar de estudiar, es en lo que ha contribuido la tecnología en nuestras débiles, recientes generaciones, cómo se enajenan con el celular, las tabletas y lap tops, además con los juegos de cualquier índole, las aplicaciones creadas para darles juego a la estupidez, además de proporcionarles dinero, etcétera, con mayor facilidad se alejan del estudio, de los pocos valores que le quedan a nuestra sociedad, amagan a los padres de familia con irse de la casa si les pretenden imponer disciplina, y la mayoría de progenitores, ni los quieren realmente, ni tienen el valor suficiente para tomarles la palabra y que se larguen, haber quien soporta gente floja, y en la mayoría de los casos, te aseguro, amable lector, que regresan cambiados pronto a casa, los que no lo hacen, es porque se van a vagar por las calles, porque tienen amistades, dicen ellos, que les lavan el poco cerebro que poseen. Pero pocos, muy pocos, cambian en domicilio ajeno. Generalmente, este lugar donde los aceptan es en casa de alguno de los abuelos, tíos, primos, como dije, sí hay casos de individuos que por dignidad, de no regresar con sus padres derrotados, se comportan en la casa desconocida, por no ser la original.

 

Esto por supuesto influye en los empleos, algunos patrones reciben a menores de edad, les dan empleo, pero obviamente reciben un menor salario, porque desde que los reciben ambas partes ya lo saben y lo aceptan, ahí no puede haber ningún tipo de explotación, sin embargo, en México, todo se quiere enrarecer para que los medios de ¿información? tengan de que hablar, aunque pocas veces haya consecuencias reales.

 

Retomando el tema, con esa escasa preparación académica, salen a las calles a buscar empleo, engañando, como dije antes, a los posibles contratantes, que en poco tiempo aprenden el arte u oficio respectivo, y claro que hay casos de éxito, pero la mayoría van cambiando de chamba más que lo hacen de su ropa interior, esto por supuesto es en detrimento de la calidad de los productos que en general se fabrican, construyen o realizan, porque, ese tipo de gente, no entienden que los que están mal, por su poca calidad técnica, son ellos, no obstante, están diariamente en la fuente de trabajo, intrigando en contra de la misma y de sus patrones y/o contratantes, además de que ya están pensando en buscar otro lugar de ingreso, por lo que no están concentrados en sus labores diarias, que apenas están aprendiendo (conociendo).

 

Esto es cuando les toca maquilar, seleccionar, empacar, mercancías y/o productos, pero cuando están frente al público, la cosa, no varía demasiado, porque según como su estado de ánimo se encuentre ese día, es como van a vender lo que tengan asignado, porque la mayoría de empleos, ya tienen un sueldo base y no se les exige cierta cantidad de venta o monto, así que no se sienten obligados a vender más. Niegan la mercancía que no está a la vista, incluso la esconden, apagan los aparatos que las mantienen frías o calientes, según sea el caso, esto con la finalidad de que el cliente se vaya a otro lugar, pocos, muy pocos, se toman un refresco o cerveza al tiempo, la mayoría lo buscan bien frío, y más cuando hace demasiado calor.

 

Pero en pequeñas tiendas de la esquina, que ya cada día son escasas, esto sucede, refrigeradores apagados, carnes, quesos y embutidos en mal estado porque no los mantienen con la temperatura adecuada, huevos podridos, en fin, muchos productos en pésimo estado, esto desde luego va decayendo en el patrimonio del dueño o comerciante, que la mayoría, contratan gente, sin conocer su honestidad en todo y para todo, recuerda inteligente lector, que no solo se mide ésta, por que no se roben las cosas, también tiene que ver, en la forma de conducirse en otros aspectos, y se desentienden del negocio, casi no se paran por ahí, y cuando ya están en quiebra, se preguntan: ¿Por qué les sucedió eso?, por su falta de compromiso, también de ellos, porque decían nuestros abuelos, al ojo del amo engorda el caballo, si no estás al pendiente de la actividad que realices, si no observas como actúan los empleados, tarde o temprano, tendrás pérdidas económicas.

 

Los empleos públicos son lo mismo, pero ahí los jefes son iguales o peores que los empleados de base que ya están amañados a lo peor, y como el dinero, no les importa a ninguno, porque ninguno pierde, pierde el pueblo, porque se dejan de recibir obras, pero específicamente, ningún empleado público, pero esa es otra historia.

 

Así es la rueda de la fortuna del empleo y el desempleo nacional, cuando no se tiene trabajo, la gente miente engañando a los patrones y empresas que están dispuestos a dar su máximo esfuerzo y escaso conocimiento en beneficio del lugar, incluso hasta están conformes en recibir un menor salario, porque les urge ganar dinero, pero una vez que ya son aceptados, cambian radicalmente, son los peores de lo peor, y como hay épocas del año en que la mano de obra escasea, los micro, pequeños y medianos empresarios, incluso hasta los grandes tienen que aguantar a esos empleados desleales, deshonestos, que hacen como que trabajan, porque según ellos, hacen como que se les paga, todo esto es en perjuicio de todos, porque compramos artículos y productos de mala calidad, en mal estado, que nos afecta, incluso a la salud, pero no nos damos cuenta, porque es poco a poco el malestar que se va generando por consumir productos higiénicamente mal preparados, aquí abarco desde lo más frecuente y común, la venta de comida en la calle, sean en la banqueta, o en lugares establecidos, en los que la higiene de la preparación, deja mucho que desear, eso, poco a poco, nos va enfermando, aunque de momento durante la degustación se diga, qué rico manjar acabo de comer, o lo que dicen muchos, lo que no mata me fortalece, algo hay de certeza en que están comiendo algo no totalmente limpio, pero como se dice en nuestro país, les vale. Aunque cuando ya están graves, por enfermedades que los médicos desconocen, no se quieran morir. Ese tipo de gente, que cuando aparentemente no tienen miedo a morir, son los peores a la hora en que eso está por suceder, son los que quisieran comprar más salud, más tiempo de vida. Así es el mexicano promedio, vive de las apariencias, hasta para vivir o morir. Seamos más analíticos de nuestro diario vivir, es por el bien de todos, pero en la actualidad es por el perjuicio de todos. ¡Ánimo!