En la larga dictadura del PRI, como partido de estado que dirigió los destinos de prácticamente todos los mexicanos y sus instituciones, se generaron prácticas que, con la competencia imperfecta que se da actualmente, están desapareciendo poco a poco.
El voto duro, corporativo, comprado por prebendas y concesiones de todo tipo que otorgaba el régimen priista en México, todavía tiene fuerza, pero va menguando con el transcurso del tiempo y eso se observa también en Tacámbaro, al participar más partidos en el mercado electoral.
El PRI siempre gobernó Tacámbaro hasta que, por divisiones del propio tricolor y sus caciques, el Partido Acción Nacional llegó al poder con el cooperativista Nicolás Tavera Guijosa a principios de la década pasada. En las elecciones municipales pasadas, Octavio Aburto se puso al brinco a Valentín Rodríguez y se fue como candidato del PAN, ganando nuevamente el gobierno local y desarrollando una gestión desastrosa, complementada con la bien diseñada guerra sucia que orquestaron los caciques del municipio.
Ahora, lo hemos dicho, las elecciones del próximo domingo no están fáciles para nadie y menos para el otrora poderoso PRI, el cual refleja nerviosismo y apela que el voto duro le haga ganar los comicios, llevando a Mauricio Acosta al poder del ayuntamiento.
Con un voto duro que oscila entre 7 y seis mil votos del PRI, pero en franco declive, hay posibilidades de ganar el ayuntamiento, pero si ese voto se diluye como se diluyó en las elecciones anteriores, el tricolor la tiene difícil y debe de armar la estrategia que tiene bien practicada en el cuarto para las doce.
El PRI tiene experiencia, muchas mañas, comandos de guerra sucia al interior del partido y no quiere perder las elecciones, echando toda la carne al asador en estos días y, sobre todo, en la movilización del domingo 7 de junio, todo con el fin de llevar al poder a Mauricio Acosta, quien es candidato de un instituto que ahora sí compite en la realidad con sus pares opositores.
La lucha se dará, sin duda también, en la mesa jurídica, donde el PRI tiene gente capaz para defender un triunfo que se avecina o… una derrota ante su acérrimo rival del PRD. La moneda está en el aire…