GREENPEACE
14 ABRIL 2021.-Durante el actual periodo de sesiones (que concluye el 30 de abril), el Senado de la República tiene una oportunidad única que no debe dejar pasar: prohibir en la legislación federal los plásticos de un sólo uso sin echar atrás los avances que han hecho los estados y municipios en la materia.
En México existe una Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos (LGPGIR) y su reglamento.
Al menos desde 2017, distintas organizaciones como Greenpeace (integrada a la Alianza México sin plásticos) han propuesto a las y los legisladores federales reformar la LGPGIR para prohibir los plásticos de un solo uso con soluciones de fondo.
No obstante, por la falta de voluntad política por parte de las y los legisladores, estas propuestas han quedado cada año en la congeladora del Senado.
A un mes de que termine un periodo de sesiones más en el Congreso, queremos recordar cuál es la importancia de legislar en la materia:
Cada persona produce anualmente 46 kg de plásticos.
79% de los residuos plásticos terminan en vertederos, lo que contamina los ecosistemas marinos y afecta la biodiversidad y la salud humana.
30% de los individuos de aves marinas, 4.4% de los mamíferos marinos y 32% de las tortugas marinas tienen plástico en sus estómagos.
Menos del 10% de los residuos plásticos se reciclan.
Cada tonelada de plástico produce 5 toneladas de dióxido de carbono CO2.
Más de 90% del plástico se produce a partir de la transformación directa de los derivados del petróleo, lo que representa más de 6% del consumo mundial de hidrocarburos.
El plástico necesita aditivos químicos para que resulte práctico y se mejore su estabilidad, flexibilidad y apariencia, entre estos aditivos se encuentran sustancias químicas cancerígenas.
Estos datos fueron retomados del informe “Cuando la basura plástica nos alcanzó y nos rebasó” y del informe “Impacto de la contaminación por plástico en áreas naturales protegidas mexicanas”, que elaboró Greenpeace.