El mural plasmado en el interior de la Biblioteca Pública “Gertrudis Bocanegra” de esta ciudad de Pátzcuaro está cumpliendo el LXXVI aniversario de haber sido pintado por el muralista mexicano, Juan O’ Gorman, durante los años de 1941 y 1942. De acuerdo a la biografía del autor y datos relacionados con este mural, que indica específicamente la historia de Michoacán, desde la época antigua, la prehispánica y hasta que llegaron los conquistadores a robar las tierras y pertenencias, así como también en el mural se indica las enseñanzas de Vasco de Quiroga y la evangelización a los indígenas de aquella época, hasta llegar a la época de la Independencia de México y la Revolución Mexicana.
Los datos existentes sobre este mural señalan que entre otros murales (más de diez), entre estos el de la Biblioteca Pública, fueron por encargo de Edgar Kaufmann, quien tras algunos acuerdos con Juan O’ Gorman sobre el tema y el lugar donde sería pintado, el artista supo elegir un bonito inmueble y ese fue la mencionada Biblioteca, la cual había sido inaugurada en el año de 1938 por el entonces presidente de la república, Lázaro Cárdenas del Río, y que anteriormente este edifico del siglo XVI había sido el templo de San Agustín y el cual fue expropiado por el propio Lázaro Cárdenas.
En el mural titulado “Historia de Michoacán”, el artista eligió algunos episodios que conformaron la vida purépecha, además echó mano de antiguos textos de Fray Bernardo de Sahagún y de Fray Juan de San Miguel que datan del siglo XVI, hasta los más actuales como de Eduardo Ruíz. Su relato de la pintura inicia en la parte alta del muro frontal del edificio con la erupción del volcán del Estribo Grande, ubicado al poniente de la ciudad y donde indicaba que esta zona era volcánica y O´ Gorman no se equivocó, porque en el tiempo que pintaba el mural, nació el volcán Paricutin cerca de esta zona, a unos kilómetros de Pátzcuaro.
De la misma manera, O’ Gorman hizo una sinuosa crónica en la que imaginariamente se enlazan por igual sucesos legendarios e históricos y que gracias a sus conocimientos arquitectónicos , consigue mostrar los hechos desde distintos planos y perceptivas plásticas que transforman el enorme muro del ábside de esta ex iglesia, en una enorme ilustración histórica, donde se observa tanto el festejo de agradecimiento a los dioses por el lugar elegido para su comunidad, como los sacrificios que se les ofrendan.
A la vez, indica la llegada de los conquistadores, la crueldad con la que trataron a los nativos y el tormento al rey Tanganxoan para que entregara los tesoros; también plasmó a Vasco de Quiroga, enseñando las artes y evangelizando a los indígenas, así como a los personajes de la Independencia y la Revolución Mexicana. Este mural se terminó en febrero de 1942 y por ese motivo el personal de este centro de trabajo montó una exposición de fotos antiguas del lugar, donde hay algunas de la inauguración como biblioteca y se puede observar que aún no estaba el mural en el muro frontal.