27 diciembre, 2024
ROTATIVO DIGITAL

Miedo…

Lic. Alfredo Castañeda Flores      Analista

 

La mayoría de los mexicanos dice ser valiente, dice no tenerle miedo a nada, incluso se “burlan” de la muerte, pero, como tantas cosas, solo es una cortina de humo, una máscara para esconder su verdadera y miedosa personalidad.

 

El miedo y la ignorancia son lo mismo, por lo tanto, un miedoso es ignorante y un ignorante es miedoso, claro, con sus contadas excepciones. El miedo tiene algunas variantes que pueden provocar enfermedades leves, graves e incluso la muerte y las personas que razonan, analizan, reflexionan, nos damos cuenta que eso es lo que está sucediendo con la llamada “pandemia”, el miedo, la angustia, el terror está enfermando y matando a mucha gente.

 

De los miedosos que andan por la calle con cubre bocas, careta y/o guantes, podemos darnos cuenta de su nivel del miedo, porque hay quienes solo usan uno, otros dos y hay algunos que se ponen los tres, además de que hay otros más exagerados que traen un gel antibacterial o sanitizante, palabra tomada del anglosajón, en nuestro idioma no existe, aquí sería desinfectante; se rocían con ellos; aparte de las manos, las suelas de los pies; en sus casas tienen tapetes, se cambian de ropa, se bañan llegando, lavan todo lo que compraron, etc., y eso, amable lector, no es normal, es una desviación mental que el miedo provoca, incluso hay unas conductas tan inverosímiles que quizás te ha tocado presenciar.

 

Esto, como tantas cosas, que los poderosos tratan de imponer a la población, tienen la complacencia de muchos sectores, principalmente los medios de comunicación o mejor dicho de desinformación, porque son los principales que un día sí y al otro también, están hablando solo de lo malo, lo negativo, lo peor, presentan los peores escenarios de una enfermedad que muchos especialistas han declarado que no es grave, pero al ser minoría, prefieren solo compartir sus opiniones en plataformas que no tienen mucha penetración, como la TV y la radio, porque ahora resulta que los ciudadanos, en su mayoría, creen ciegamente en lo que los mal llamados líderes de opinión dicen con una seguridad increíble, vamos, ni siquiera lo dudan, simplemente, les creen lo que vociferan, porque es su trabajo, porque eso es lo que les ordena el dueño del medio de información.  Va de por medio la fuente de trabajo, de estos mercenarios de la comunicación.

 

No es un secreto que los medios de información, en su propiedad, tienen relación, aunque en apariencia, sean competencia, por consiguiente, sea o no la causa la familiaridad, lo es el interés económico y el enorme negocio que representa tener un canal de televisión o una estación de radio, lo que los hace ponerse de acuerdo y presentar las mismas notas noticiosas todos los días y todo el día, porque de lunes a viernes hay noticiarios en la mañana, al medio día y en la noche, los sábados y domingos descansan, excepto TV Azteca, que sí tiene programas de ese corte. Como señalo en mis participaciones, la gente que analiza, razona, reflexiona, se da cuenta de esto y peores cosas. Pero éstas son cualidades de las que carecen la mayoría de ciudadanos. Desde niños, nos han impuesto que las mayorías mandan, aunque nos lleven por caminos de mediocridad y pobreza.

Ahora que inició el nuevo ciclo escolar, no se auguran resultados positivos, porque las madres no tienen la paciencia para permanecer al lado de su hijo o hijos, durante las clases que ahora, para variar, se trasmiten por televisión abierta, aquí está parte del pago que recibieron las cadenas televisivas nacionales por prestarse al juego de la pandemia, la dádiva de uno o quizás dos canales nuevos de TV para cada una de ellas.

Regresando al tema, para que los alumnos aprendan en esta nueva modalidad de enseñanza, es necesario que alguien los acompañe, durante las horas que cada nivel educativo tienen asignadas (van de preescolar, primaria, secundaria y bachillerato), y como dije antes, las mujeres no están programadas para tolerar a sus hijos, mucho menos para tener la paciencia de acompañarlos tomando clases, eso tratándose de las mujeres que tienen pareja, pero peor aún, las que son madres solteras y tienen la necesidad de salir a trabajar, menos pueden acompañar a sus hijos, si en la modalidad anterior, a la mayoría de los niños, no les revisaban sus tareas y trabajos escolares, ahora menos.

Ahora imagínate, inteligente lector, cuántos días van a aguantar esta situación los alumnos, pocos, seguramente, están viendo o haciendo otras cosas, y la televisión encendida, otros de plano ni a eso han de llegar y no por culpa solo de ellos, porque la mayoría de hogares, apenas y tienen un televisor y ahora con la “necesidad” de quedarse en casa, se aburren sin hacer otra cosa que estar viendo series, películas, telenovelas o cualquier otro programa, por lo mismo, no les han de dejar tan fácilmente el uso de la pantalla a sus hijos. Y eso, generará más ignorancia y por consiguiente, miedo en los niños y jóvenes que cuando sean adultos, van a expresar, en sus acciones y tareas cotidianas, aunque con palabras, digan no tenerlo, como hoy lo hacen la mayoría de mexicanos, pero que acatan sin chistar, todo lo que les imponen para manipularlos, enfermarlos y hasta matarlos, en los próximos meses.

 

Una mente fuerte, siempre duda, no se deja engañar tan fácilmente por las mayorías, porque está probado que no siempre tienen la razón. ¡Ponte atento!