17 enero, 2025
ROTATIVO DIGITAL

Mauricio Acosta es quien monopoliza, para él, el presupuesto del ayuntamiento de Tacámbaro

¿Imagina usted a una madre reprochar a sus hijos que pidan hoy de comer porque ayer ya comieron? ¿La imagina, además, acusar a sus hijos de “monopolistas” porque requieren vestido, calzado, útiles escolares, medicinas? ¿O porque les surgen nuevas necesidades y porque los demás hijos que le van naciendo también requieren satisfacer sus necesidades por el solo hecho de existir? ¿O que los avergüence públicamente porque debe destinar “sólo para ellos” el total de su gasto? Pues absurdos como estos ocurren hoy en Tacámbaro. Vea si no:

El pasado viernes 31 de marzo del presente, la Dirección de Comunicación Social del Ayuntamiento de Tacámbaro publicó un boletín de prensa con el título “MONOPÓLICO PLIEGO PETITORIO DE ANTORCHA CAMPESINA”, donde el alcalde Mauricio Acosta Almanza da a conocer su versión ante las recientes acciones del Movimiento Antorchista y dice que “las acciones radicales del grupo antorchista, como la toma de presidencia y cierre de calles, solo son medidas de presión para que las autoridades cedan a sus demandas” y que además no debieron ser pues “se están resolviendo” las demandas de Antorcha. Primero, hay que señalar que la protesta se debió a que el edil citó a una mesa de trabajo a una comisión de antorchitas para el día jueves 30 de abril a las 9 de la mañana, a la que nunca se presentó y con la mano en la cintura mandó decir que estaba con el señor gobernador y que se le olvidó que tenía programada en su agenda desde hace 8 días una reunión con Antorcha. Y segundo las protestas son en la calle debido a que como seres humanos no tenemos otro lugar donde manifestarnos, ni modo de movilizarnos en el aire.

El boletín continúa: “Dijo (el edil) que para cumplir la totalidad del pliego petitorio que presentan los colonos y agregados de otros sectores, tendrían que enfocar la mayor parte del presupuesto sólo para ellos, lo que no es posible, ya que el municipio tiene necesidades prioritarias en diversas regiones que deben ser atendidas, la obra pública debe ejecutarse de manera equitativa, dando preferencia a la infraestructura básica”. Note usted que el señor presidente está reconociendo que el pueblo organizado exige que el gobierno le regrese en obras y servicios el dinero que le hace llegar a través de los impuestos. En el pliego petitorio se le pide que atienda en Pedernales las obras de un agua potable, dos drenajes y ampliación en tres líneas de energía eléctrica, una barda perimetral para escuela, un salón para una secundaria, un drenaje la Parotita, pavimentación de tres calles de 75 metros cada una. ¿Es que el agua, el drenaje y la luz no son demandas prioritarias? ¿Qué es lo que él entiende como infraestructura básica? ¿O sea que los pobres deben sentirse avergonzados por exigir justicia social? ¿Y qué busca el alcalde al pretender que sientan vergüenza? ¿Y por qué no es posible enfocar la mayor parte del presupuesto para el pueblo de Tacámbaro? Si no es para el pueblo, entonces ¿para el beneficio de quién se aplica el presupuesto del municipio?

Dice también: “En este año ya se les ha beneficiado con el pago de la renta de la casa del estudiante “Espartaco” y el pago para 16 instructores que imparten clases en sus escuelas”. Haciendo a un lado la evidente insidia, declaramos que no son “propiedad” de Antorcha. Alumnos, maestros y padres de familia forman su grupo de Antorcha para que las escuelas públicas salgan adelante, ya que son escuelas olvidadas por la Secretaria de Educación Pública; mientras los maestros le sirven al pueblo sin salario alguno ¿de qué van a vivir? ¿De aire? Si han logrado el apoyo de ayuntamientos anteriores al de Acosta Almanza es porque lucharon por él, lo merecen y porque de alguna manera les ayuda a mitigar la pobreza. ¡Ahora resulta que con Mauricio Acosta los grupos populares impulsores y defensores de la educación pública deben sentirse avergonzados de ello, indignos “monopolistas”! ¡Hágame usted el refabrón cavor! PRIMERA DE DOS PARTES.

Tacámbaro, Mich., a 4 de abril de 2017