Lic. Alfredo Castañeda Flores Analista
Quiero aprovechar esta oportunidad para escribir de un tema actual, reciente, que muchos, sobre todo hombres, no se dan cuenta del peligro que nos acecha, con esta modalidad utilizada.
Si, inteligente lector, hablo de las mujeres, las frágiles y hermosas mujeres, esas que la mayoría creen indefensas, esas que buscan más derechos, porque sienten que los que tienen, no son suficientes para vivir mejor. Quiero dejar de manifiesto que lo aquí expresado no tiene nada que ver con misoginia, acoso o vulnerabilidad hacia la mujer, simple y sencillamente es para evitar que el hombre siga siendo víctima de sus acciones.
Desde siempre se han dado casos, sin embargo, como algunas cosas, estos se han incrementado en los recientes años. Me refiero a conductas que pueden tipificarse como delitos, muchas veces graves, por sus consecuencias.
A diferencia del hombre, la mujer es más ambiciosa en su diario vivir, aunque claro, esto va cambiando, de conformidad con el entorno social, familiar y cultural, en el que habitan, además de su aspecto físico.
Por supuesto que una mujer de piel blanca, rasgos finos, cara hermosa, cuerpo escultural y ojos de color, aunque provenga de una población pequeña, (culturalmente, así lo observamos en cualquier Estado del país, hay más gente blanca en poblados y rancherías que en las grandes ciudades), es fácil de enganchar, porque tienen la necesidad manifiesta de tener dinero, de que sean sacadas de su entorno de pobreza y marginación y por lo mismo, esto no las detiene para hacer cualquier cosa, con tal de alcanzar sus objetivos.
También, hay mujeres de tez morena, que son hermosas, con esculturales cuerpos, estatura superior a la media y con una enorme ambición, que son reclutadas para afectar a muchos hombres. Pero normalmente la raza blanca atrae más.
Al decir ambiciosas, no estoy exagerando; según las estadísticas y experiencia personal, en mayor porcentaje, las mujeres aman más el dinero, que los hombres. En cualquier pareja de la actualidad, la mayor cantidad de problemas cotidianos que viven, tienen que ver con cuestiones monetarias, haya o no haya hijos, sean o no casados. Cuando se dan los divorcios, quieren dejar sin nada a los hombres, y si ellas ayudaron a incrementar el patrimonio familiar, la situación se torna peor, porque se sienten con más derecho para quedarse, en mayor cantidad, con los bienes muebles e inmuebles que se tengan. Aquí hago un paréntesis para señalar que soy abogado y he visto tantos casos de este tipo.
Pero aún sin tener una pareja estable, se prestan a cualquier situación que les redunde en importantes ganancias económicas, para ello, se alían con hombres que las utilizan para obtener de otros hombres, con posibilidades económicas, dinero, siempre dinero.
Te preguntarás ¿cómo lo hacen?, aquí te doy algunas formas, amable lector.
Una mujer ambiciosa, cuyo objetivo es lograr lo que desea, no se mide en hacer lo que le pidan y aun más. Por eso, se encargan de buscar hombres casados, con trabajos bien remunerados, empresarios, emprendedores, etc. Los estudian, se aprenden sus movimientos y una vez preparadas, se hacen presentes, ya sea en el gimnasio, en unidades deportivas, clubes, cafés, restaurantes, incluso en la calle, y como dije antes, son mujeres hermosas, por lo que la mayoría de las víctimas caen sin remedio en sus garras, aquí el resultado varía, van desde el chantaje y la extorsión (graban videos íntimos), hasta el secuestro. Algunas veces llegan a asesinar a su víctima, pues carecen de escrúpulos y solo ven su desmedida ambición. Son capaces de tener relaciones sexuales con quienes se les pida hacerlo, de llegar hasta donde sea, siempre y cuando obtengan ganancias económicas, es decir, no les importa nada, solo lograr sus objetivos, que es tener dinero.
Los que las enganchan pueden tener varias ideas en su mente, pero a las mujeres, les pagan en efectivo, sea dinero contante y sonante o bienes muebles o inmuebles. Lo que sus “patrones” hagan con las víctimas, no les importa en lo más mínimo, porque ellas ya obtuvieron lo que quieren. Las hay de distintas edades y estado civil, estudiantes, empleadas, hasta casadas que tienen doble vida.
Esto no es difícil de observar, lo vemos en gente famosa: actrices, cantantes, ex reinas de belleza, modelos, que si llegan a tener hijos, solo les sirve para obtener más dinero del padre en cuestión. También lo vemos en los noticieros, sea en la televisión o en los diarios de papel, en muchos eventos donde hay negocio, es seguro que aparezca una mujer.
Es más, amable lector, hasta las mujeres que trabajan por su “cuenta”, las que dicen no tener un proxeneta, un lenón, un “padrote” que las regentee, también usan estas prácticas con sus clientes ocasionales, para chantajearlos, amenazándolos con mostrar mensajes, llamadas, incluso videos íntimos que obran en su poder. Esto durante la “pandemia” se hizo público, porque ese tipo de mujeres, al no poder salir a trabajar, por el confinamiento, se quedaron sin dinero para subsistir, entonces comenzaron a llamar a esos hombres que han usado sus servicios, pidiéndoles dinero prestado (por la buena), pero al no recibir respuesta, esa petición se convirtió en exigencia, llegando varias de ellas, a las fiscalías de los estados, porque el acoso era exagerado.
Así es que mis congéneres, tengan cuidado con las mujeres, aprendan a conocer sus verdaderas intenciones, no caigan con facilidad en sus garras, analízate y te darás cuenta que no te buscan por joven, bello o por ser un semental en la cama, se te acercan porque tienes bienes o dinero que les puede servir para sus objetivos, ten cuidado en lo que le escribes en los mensajes que intercambian, ahora con la tecnología tan avanzada que tenemos, toma más vigencia la máxima jurídica que dice todo lo que digas (aunque sea escrito) puede ser usado en tu contra.
Soy hombre y sé que nos cuesta, en el ego masculino, dejar pasar las “oportunidades” que encontramos en cualquier lugar que frecuentamos, pero si ya tienes una vida hecha, una familia formada, mejor evítalas, principalmente en tu zona de residencia, si viajas y te sale una oportunidad, adelante, pero evita dejar huellas de lo que más adelante puede desencadenar problemas económicos o de salud, en tu perjuicio, no des tu número de celular (whatsapp), o si lo das, no mandes mensajes comprometedores, ni hagas llamadas de ese estilo, así como tampoco des mucha información personal, entre menos sepan de ti, es mejor, recuerda que la vida es muy corta y lo principal es ser feliz, por eso no te compliques con problemas, por una mujer que está entrenada para manipularte y sacarte dinero. Muchos poderosos han perdido poder y/o dinero por caer en las redes de mujeres ambiciosas. ¡Cuídate!
23 de octubre del 2020