Los sedimentos acumulados por más de 70 años han causado la pérdida de una tercera parte (aproximadamente 30 Km2) de la superficie original del Lago de Pátzcuaro, advierten investigadores de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH).
Juan Pablo Ramírez Herrejón y Omar Domínguez Domínguez, investigadores del Laboratorio de Biología Acuática, de la Facultad de Biología de la UMSNH, afirman que “la deforestación y cambio de uso de suelo de la zona de captación de agua que alimenta el cuerpo de agua, ya sea por escorrentías o infiltración hacia los manantiales, ha cambiado en los últimos 70 años”.
“Antes eran zonas boscosas y ahora se realizan actividades humanas como la agricultura (40%), la ganadería (30%) y el desarrollo urbano (20%)”, concluyen en un estudio titulado: “El Lago de Pátzcuaro, un lago en decadencia”.
Tales cambios, precisan, causan desplazamientos de sedimentos de las partes altas de la cuenca al lago, “se calcula que cada temporada de lluvias aproximadamente 100,000 m3 son depositados en el vaso lacustre”
Lo anterior, afirman, azolva el lago y hace que pierda su profundidad, llegando a desaparecer en su totalidad la mayoría de las zonas someras que existían en sus márgenes. Estos humedales, de manera histórica, servían como sitios de reproducción de la mayoría de especies de peces y anfibios nativos como el pez blanco y achoque de Pátzcuaro (ajolote).
Asimismo, alertan que la profundidad máxima del manto acuífero ha disminuido más de 5 metros y la transparencia del agua ha cambiado de 3 o 4 m en el año 1930 a menos de 30 cm en el 2010. Esta condición ambiental, además de favorecer la proliferación de malezas acuáticas y aunado con el incremento en el aporte de nutrientes, ha causado el crecimiento exponencial de algas microscópicas, evidenciado por aguas verdosas con transparencia nula en algunas zonas del Lago.
Todo ello, y otros factores negativos, “han provocado la disminución de muchas de las poblaciones de peces y otros organismos que habitan el lago, llegando incluso a provocar la posible desaparición del achoque en el cuerpo de agua”.