19 abril, 2025
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La historia del bastón de parota

Así es que el citado año 1538 se colocó la primera piedra del convento, el señor cura FRAY DON DIEGO DE CHAVEZ adoptó bajo su protección una huérfana nacida por esos días, al que dio nombre de Agustina al aplicarle las aguas del bautismo, acto que revistió notable solemnidad para constituir la inauguración de una obra grandiosa.

Agustina creció mimada de todos y tan hermosa y buena por el año1553 que cumplía sus 15 abriles, tenía enamorados a todos los jóvenes de la comarca, sobresaliendo, entre ellos, por la fogosidad de su pasión y por su calidad, el hijo de Cristóbal de Oñate, primer encomendero que tuvo Tacámbaro.

Era el obscurecer del martes Santo de 1553 y, aquella tarde, Agustina salía de la pequeña iglesia adjunta al convento, cuando 5 y 6 embozados salieron del muro de la iglesia y cerraron el camino de la joven. Alguno aún llegó a ponerle la mano sobre ella y el jefe del grupo no era otro que el hijo del encomendero; Agustina hizo esfuerzo sobrehumano y logró huir de sus raptores, donde fue alcanzada por su audaz enamorado.

El raptor estaba obcecado, sus esbirros ya llegaban y, viendo la joven que nadie la escuchaba, tiró del puñal del joven Oñate y exclamó:

¡PRIMERO MUERTA QUE DESHONRADA Y HUNDIO EL PUÑAL EN SU PECHO!

A la muchacha le salían borbotones de sangre; Oñate quedó paralizado y vio el cadáver por un instante y luego huyó; de pronto llegaron los frailes junto al cadáver.

De pronto, también, se presentó fray Juan Bautista, que ya tenía fama de santidad, se arrodilló delante del cadáver de Agustina y lloró largamente. Luego, irguiéndose, dijo así: Hermanos, por tratarse de Agustina y donde ocurrió el hecho, predijo grandes desgracias para el convento y que será consumido varias veces por el fuego.

El santo fraile ahondó sus mismas manos en el suelo, plantó su propio nudos de bastón de parota; el hecho cierto es que el bastón se convirtió en un frondoso árbol que cuidaban los agustinos con empeño.

Un martes santo del 1567 desapareció el árbol de parota a 14 años del lamentable hecho y, sucesivamente, el martes santo de 1706 y 1865, respectivamente, se incendió la iglesia. La profecía de fray Bautista se cumplió…