Lic. Alfredo Castañeda Flores ANALISTA
26 oct. 2024.-Nuestra protagonista de hoy es de esos casos extraños de la fusión de dos nacionalidades, aunque los gobernantes en turno se exhiban en su ignorancia, pero esa es otra historia. Esas uniones de culturas si resulta importante, sobretodo, para los hijos que llegan a nacer de las mismas.
Resulta que un español nace, crece y se casa en su país natal con una mujer de su mismo origen, tienen un hijo; el señor, como todos los europeos y extranjeros en general, trabajó duro, ahorró, gastó y guardó, sin embargo, su esposa antes de los cincuenta años de edad, fallece de una enfermedad del siglo anterior y actual, lo cual le afectó mucho y se vino de España a nuestro país, como es costumbre y tradición hacerlo desde hace muchos años.
Como traía dinero, ya que nuestra moneda siempre es de las más devaluadas del mundo, incluso cuando se utilizaban las pesetas, comenzó a comprar propiedades en México. Terrenos, casas y lo que encontraba como oportunidad. De inicio, el no quería saber nada del amor, ya que estuvo completamente enamorado de quien fuera su esposa. Su hijo ya mayor de edad, decidió quedarse en España. Por lo que aquí llegó solo. Así fue transcurriendo el tiempo, tenía servidumbre a su servicio, pero buscaba el menor contacto posible, sobretodo con las mujeres. Pero el destino es incierto y juguetón, la persona encargada de la limpieza de su recámara, varias ocasiones, se cruzó con él, intercambiando unas cuantas palabras, así pasó cierto tiempo, durante el cual, esos encuentros fueron creciendo de simples palabras de atención (Buenos días, gracias, etc.), hasta tener unas verdaderas conversaciones como si ya fueran amigos de mucho tiempo, y efectivamente, amable lector, acertaste, se enamoraron, se casaron, y procrearon a una niña, a la que pusieron el nombre de Blanca. La niña desde su nacimiento tiene ambas nacionalidades, sin embargo, su pasaporte usado es el español. Y te diré la razón, aparte de que cualquiera lo preferiría. Pero somos hipócritas.
Blanca creció con todas las atenciones de un padre, aunque ya mayor, disfrutó de la mejor educación de aquel momento, además de asistir a las escuelas normales, primaria, secundaria, preparatoria y universidad, eso sí, siempre lo hizo en las públicas, pese a tener dinero, los extranjeros no creen en las universidades privadas (particulares), sino que consideran que eso depende del alumno y la complementan con otras disciplinas. La mandaba a clases de inglés, de bordado, tejido, natación, y lo que ambos quisieran (padre e hija), pero curiosamente, al tener rancho y caballos, a la pequeña le gustó la charrería y se adiestró en el arte de las escaramuzas, una mezcla de España con el llamado deporte nacional, así como ella. Allá le llaman el arte de la punta.
Estuvo en los equipos regionales, estatales y hasta el nacional de ese deporte, si que era disciplinada para lo que le gusta, claro que sacó el temperamento europeo. Sin embargo, como ella dice, lo que no le gustaba, como a cualquier mujer, eran las actividades propiamente de ellas (cocinar, lavar trastes, etc.). Y su papá no la forzaba a que aprendiera. Sin embargo, debido a la edad mayor de su padre, siendo una adolescente, él falleció, quedándose solo con su mamá, ella sufrió mucho por su pérdida, ya que estaba acostumbrada a él, a sus mimos, a su cariño y a todo lo que de por si una niña experimenta con su padre.
Al tener dinero suficiente, el deseo de su padre, fue que siguiera haciendo lo que le gustaba y no se limitaran en nada, así lo hicieron, desafortunadamente, para algunas personas, la vida les depara más sufrimiento que el normal, su hermano mayor, a quien conocía perfectamente y ambos se querían mucho, en un accidente automovilístico en la madre patria, a los dos años de la muerte de su padre, falleció, siendo otro duro golpe para ella. Quedándose sin su primera familia, padre y hermano, aunque si tiene varios tíos, primos y demás, no es lo mismo.
Así terminó de crecer, viviendo sola con su madre, y con el dinero de su padre, y de vez en cuando se daba sus vueltas a España, porque allá también tiene propiedades en el área de Asturias, a media hora de Oviedo, la ciudad más conocida de la región, acá en México, pero hay otros lugares más cercanos. Contrario a todo, sus familiares españoles la recibieron y lo siguen haciendo, con mucho cariño, sin coraje, sin envidia, sin ninguno de los sentimientos negativos que se dan tanto por estos lados. Ya que desde que se casó su mamá, la familia mexicana de ella, dejaron de buscarla, incluso hasta la fecha, las tratan mal, a ella y a su madre, ahí se ve la calidad de persona nacional y la extranjera, tristemente así somos.
Pero, como se dice, no importa tener todo el amor, el cariño, ni todo el dinero, siempre va a faltar algo, en el caso de nuestra protagonista, nunca ha querido dejar sola a su madre, salvo cuando se iba a Europa, ya que ella (su mamá) no ha salido del país, no ha querido hacerlo, le da miedo. Ahora ya está mayor, supera los ochenta años y menos la deja sola, ella tiene cuarenta y siete años, y si, entendiste bien, inteligente lector, no se ha casado, precisamente por su temor a dejar sola a su madre, porque oportunidades tanto en el país como en Europa, ha tenido, pero cuando ya van más en serio, prefiere concluirlas y así ha transcurrido su feliz, pero a su vez, triste vida.
Actualmente tiene un novio estadounidense que radica en Londres, Inglaterra, menor que ella. ¿Sabrá que tiene dinero? Puede ser, pero no es factor para seguir juntos, se ven dos veces al año, y aunque él ya se quiere casar con ella, ella, está esperando a que su madre desaparezca de la faz de la tierra, para ahora sí dedicarse a vivir, ojalá no sea longeva y el gringo se aburra y la termine dejando, lo que es posible y las oportunidades se le están terminando, de hecho, la maternidad es letra muerta para ella, por la edad, ya que tampoco quiso serlo por no hacer enojar a su mamá. Solo espero, como amigo de ella que soy, que su madre le agradezca todo el infinito sacrificio que hasta hoy está haciendo por ella, porque claro que ella, siempre va a decir que si, pero la realidad puede ser otra, solo ambas lo saben, para los demás, son la mejor pareja madre e hija, pero…
Ella comenta, que agradece haber heredado el carácter y temperamento europeo de su padre, porque eso la ha sacado adelante y pese a su edad, aun tiene demasiado dinero y propiedades, que de haber sido como la mayoría de mexicanos, desde hace muchos años hubiera derrochado su fortuna y hasta anduviera de empleada para medio vivir, pero no, jamás ha tenido la necesidad de trabajar para otros, pese a ser contadora pública de profesión con una maestría en el ramo, lo ha hecho pero en lo suyo y ha incrementado la herencia que le dejó su padre.
Eso, inteligente lector, es digno de reconocer, porque se quedó huérfana desde niña, su mamá sin estudios, ni preparación, no tenía forma de encausarla, aquí ella agradece la lejanía de su familia materna, porque de haber estado cerca de ella, hubieran contribuido a derrochar y dilapidar su dinero, pidiéndoles préstamos y dádivas que nunca faltan. Y la principal razón, que es mujer, porque las mexicanas no tienen educación financiera y cualquier cantidad grande o pequeña de dinero, les alcanza, así es la mentalidad femenina nacional, pero Blanca es distinta. Por eso, prefiere ser española y no mexicana, porque conoce los enormes defectos y antivalores nacionales, porque sabe que todo eso, su padre lo vivió cuando recién llegó al país, porque así se lo contó y le enseñó a cuidarse de la gente y a cuidar sus propiedades. Algo que, tristemente, los mexicanos no sabemos hacer. ¡Ánimo!