Lic. Alfredo Castañeda Flores ANALISTA
17 SEPT. 2022.-Nuestro personaje nació en la pobreza extrema en uno de tantos pueblitos de este hermoso Estado. Su madre, dedicada al campo, a las labores del hogar, apenas y sabía leer y escribir, tenía que hacer de todo para ir sobreviviendo, sin embargo, un día la conoció un joven de su edad, en uno de tantos empleos que desempeñó, se entregaron mutuamente y de esa relación nació Antonio, que fue creciendo al lado de su madre, comenzando a trabajar desde pequeño para apoyarse entre ambos, porque su padre, no esperaba tal compromiso y así como apareció, también desapareció de sus vidas, es más, él ni lo conoció, hasta hace apenas unos años.
Como si fuera telenovela, cuando se sintió viejo y enfermo fue a buscarlos para presentarse como lo que era, su padre. Él lo insultó de inicio, lo corrió de ahí, porque hizo sufrir más a su madre, pero con el paso de los días, reflexionó y lo fue a buscar, ahora a su hogar, donde tenía hermanos más chicos que él. Se perdonaron, abrazaron y su padre murió en aparente paz.
Sin embargo, el daño sicológico ya estaba marcado en la vida de nuestro amigo, pues fue creciendo con resentimiento, coraje, envidia, agresividad, y todos los anti valores que marcan las vidas de inocentes que no piden venir al mundo a sufrir.
Su madre, con todos los sacrificios que hacía, siempre lo mandó a la escuela, perdiendo solo un año, ya que lo inscribió a la primaria hasta los siete años, Toño resultó dedicado para el estudio, y aunque no era de los mejores, estaba en el centro, en el promedio, reprobando materias, pero no un grado, así fue avanzando hasta llegar a la capital del estado, ingresando a la Facultad de Derecho de nuestra máxima casa de estudios, además de que su mamá ya estaba más estable en un empleo, donde económicamente ganaba mejor que en los anteriores, que estuvo, claro que tiene que ver la edad y experiencia adquirida a lo largo de los mismos, por lo que se permitió otorgar estudio a su único hijo, que bien o mal, pese a la situación de soledad que sintió de inicio, con el transcurrir del tiempo, fue para bien, para mitigar su soltería y principalmente, para tener un objetivo para seguir adelante y no dejarse caer, en caso de haber seguido sola.
Transcurridos los cinco años de estudio de la licenciatura, Antonio se graduó y, en cuanto pudo, presentó su examen profesional, obteniendo su título y cédula profesional, aunque desde dos años antes, cuando obtuvo su carta de pasante, comenzó a litigar asuntos de poca monta, pero que le fueron dando dinero y experiencia, pero sobre todo, haciéndolo perder el miedo en el arte del abogado.
Una vez afuera, concluyendo su etapa estudiantil, en un juicio conoció a la abogada contraria, de inicio, por obvias razones no simpatizaron, ya que ambos querían obtener la sentencia favorable a los intereses de sus respectivos clientes, pero fue el inicio de una relación de amistad que con los meses creció hasta terminar en un matrimonio.
De esa unión nacieron tres hijos, varones todos, al principio, como en toda nueva familia, la situación familiar fue de altibajos, principalmente, en el aspecto económico, pero como ambos trabajaban en el ramo de su carrera profesional, las cosas fueron mejorando, hasta el grado de ir adquiriendo bienes materiales e inmuebles, cada vez más grandes y de mejor ubicación en la ciudad. Ya ambos tenía automóvil, al principio, como la mayoría, de uso, posteriormente, salidos nuevos de agencia, pero también, fueron saliendo a la luz, sus complejos que arrastraba desde su nacimiento y niñez.
El primero de ellos fue la carencia que siempre vivió, compraba todo lo que salía de novedad, aunque muchas veces ni los necesitaba, esto por supuesto, traía discusiones con su esposa, algunas de ellas demasiado fuertes, donde con el caso del tiempo, hasta insultos había, lo que por supuesto, iba deteriorando la relación iniciada por el amor. A la par, sus hijos iban creciendo y un poco, a la mala idea de que las mujeres contraponen a los hijos frente al padre y otras a lo que ellos se daban o creían darse cuenta que sucedía en la familia, los tres hijos se colocaban del lado de su madre, cuando había alguna confrontación demasiado fuerte, teniendo que irse los cuatro a la casa de su abuela, cuando la situación era insoportable. Sobra decir que Antonio, tiene un carácter insoportable hasta con los que lo conocemos como compañero de estudios. Es de los que acostumbra hablar y hablar, sin permitir que los demás lo hagan, y no solo eso, sino que en todo y para todo, él es el único que sabe y conoce, es el típico YOYO, además es envidioso, abusivo, de los que están esperando un descuido u oportunidad para pisotear a los demás, etcétera y la convivencia diaria debe ser peor, aunque sea su familia.
Para no abundar más, su esposa resultó con cáncer de seno, esto quizás no sea culpa de él, pero ya en el resultado sí influyó para demorar su recuperación, afortunadamente, le extirparon un seno y se detuvo el crecimiento del mal, pero durante los meses de detección y atención, como es natural, no podía brindar sexo a su marido, él en edad de merecer y debido a su actividad profesional, conoció algunas mujeres con las que fue intimando de forma periódica, aunque sin ninguna seguridad ni ofrecimientos más allá del momento de placer entre ambos, pero nunca falta la mujer que se aferra al apoyo económico que le ofrecen y no lo dejó en paz, hasta el grado de que le rentó un departamento, donde ya se veían de forma más frecuente, su esposa, como dije, se curó totalmente, las cosas entre ellos retomaron la normalidad, pero seguía en su otra relación medio informal, aquí aprovecho para indicar que algunas mujeres son tan malas que ellas mismas se encargan de informar a la esposa, por si o por medio de otra persona, de que sus esposos les son infieles sexualmente, siendo este uno de esos innumerables casos, la otra le dijo a la esposa lugar, día y hora en la que estaría Antonio con su amasia, la esposa, acompañada de una de sus hermanas, esperó a que salieran del lugar, para no hacer escándalo ahí, y en plena calle, ambas le cayeron a golpes a la mujer, el espectáculo fue tan grotesco que llegaron hasta la agencia ministerial, desde ahí, comenzó con los trámites del divorcio, él como todo tenía a nombre de ella y de sus hijos, ya los tres mayores de edad, casa, terrenos y automóviles le fueron quitados, porque, sus hijos estaban del lado de su madre, dejándolo sin nada, de momento, se fue con la otra al departamento, pero cuando se dio cuenta que ya no tenía dinero suficiente para ella, también lo sacó de ahí. Algo tan frecuente y común en estas relaciones.
Antonio tuvo que recurrir a sus amigos, para pedirles ayuda y dinero prestado, pero no cualquiera se lo brindaron, porque por su forma de ser no era estimado por los demás, lo que tenía bien merecido, por todo lo que durante el paso de los años había sembrado.
Sin embargo, pese a volver a algo similar de lo vivido cuando fue niño, al paso de los años se volvió a recuperar económicamente hablando y en la actualidad a sus casi sesenta años, continúa solo, y de vez en cuando tiene sexo casual con mujeres dedicadas para eso, aunque mucha gente no se dé cuenta de que eso hacen, pero su carácter no ha cambiado, es más, se ha vuelto más amargo en todo lo que ya es y ha sido. Lo importante es que los últimos años de vida de su madre, él la llenó de lo que durante tantos años le hizo falta, cosas materiales y amor, porque parece que es a la única persona a la que amó en su vida, porque lo merecía, por todo lo que ella siempre le dio. ¡Bien por él!