Una de las formas por medio de las cuales se puede incrementar el mercado interno en Michoacán es brindándole apoyo a las artesanías creadas y elaboradas por artesanos michoacanos, de forma cuidadosa y minuciosa que de generación en generación se transmite este conocimiento ancestral, así como el significado de las mismas.
¿Por qué las artesanías? Haciendo una analogía sobre la persona que las realiza, un arte-sano, es justamente eso, una persona que le da vida a las leyendas por medio de su imaginación, logra crear figuras que te transportan a un mundo místico; eso es arte, el saber transformar la materia prima que nos brinda la naturaleza en una figurilla colorida y que se realiza a través de la manufactura con el apoyo de utensilios, no se fabrican en serie por millones, por el contrario cada una de dichas figuras son distintas, la pintura, su forma, estilo, incluso el tamaño, lo que les da esa esencia de ser únicas.Por el contrario, si se fabricaran por maquinaria serían todas idénticas y no tendrían el mismo valor de tiempo invertido ni de intelecto aplicado.
La esencia de las artesanías va intrínseca en la región michoacana y tras cada artesanía elaborada se encuentra una leyenda y nuestras raíces prehispánicas.
Se deben defender para lograr un reconocimiento de las mismas; el neoliberalismo ha creado mentes elitistas, inculcándoles dogmas tales como el consumismo encaminado a una marca reconocida; penosamente son menospreciadas las artesanías y su valor se basa en lo que el comprador está dispuesto a dar por dicha artesanía y no por lo que realmente vale; como todo arte. implica dedicación para ser perfecta e inigualable.
Es un trabajo digno y honrado, pero lamentablemente los ingresos que perciben nuestros artesanos son muy bajos.
¿Las artesanías como medio para incrementar el mercado interno del Estado?
Claro, si se impulsan no solo son un hermoso adorno para los hogares, sino que se apoyaría a las familias de escasos recursos que las elaboran y el dinero dejaría de caer en manos de los magnates empresarios.
Las artesanías concebidas en Michoacán son típicas de las zonas en las que se elaboran, tales como; figurillas de barro o vajillas instauradas por los alfareros de Cocucho, Tzintzuntzan, Ichán, Capula, Patamban, Santa Fe de la Laguna, La Cañada de los Once Pueblos o los “diablitos” de Ocumicho.
La labranza de la madera para las ya conocidas máscaras de los viejitos de Quiroga, así como los alhajeros de madera entre otras figuras realizadas en Pátzcuaro y las guitarras de Paracho.
Santa Clara del Cobre con la maestranza que han adquirido con los años de moldear el cobre para crear piezas de arte.
Zacán, Tarecuato y Angahuan, por su parte, nos ofrecen una amplia confección de sarapes, fajas, servilletas, manteles y rebozos. Tlalpujahua y sus esferas.
Por hacer mención de algunos lugares y artesanías con las que cuenta el estado; si se fomenta la venta y distribución de las mismas, provocaría que el dinero fluyera sobre Michoacán, evitando las “fugas” del mismo hacia las empresas ya establecidas que ofrecen adornos o que actualmente se encuentran con sus productos reemplazando nuestras artesanías.
Así, la forma más efectiva de aumentar el mercado michoacano sería impulsando la producción y el consumo interno, para poder reactivar la economía desde adentro y fortalecerla internamente y después impulsarla externamente.
¿A qué nos referimos con esto? A la exportación de productos michoacanos, en este caso más enfocado a lo artesanal, dado que Michoacán destaca por sus artesanos, claro sin dejar de lado otros sectores importantes como el agrícola, agropecuario etc., que tambien son buena opción para el incremento del mercado. Tambien se encuentran los dulces regionales que su elaboración y producción son un sostén para varias familias michoacanas.
Lo que se debe evitar es que estas pequeñas empresas vendan a las grandes empresas, porque a fin de cuentas se podría considerar que lo único que se logra con esto es el “capitalismo” del producto michoacano sin obtener a cambio grandes beneficios; por eso debemos fomentar esa conciencia de consumo interno, así saldrán a flote las microempresas, convirtiéndose en macro y como consecuencia se tendrá mayor fluidez monetario en Michoacán, se logrará la mejora de condiciones tanto sociales, políticas y económicas del estado y Michoacán podrá ser un estado rico y en su mayoría productor y distribuidor de productos netamente michoacanos.
*Estudiantes de Derecho de la Universidad La Salle Morelia