20 enero, 2025
ROTATIVO DIGITAL

¡¡No te acabes Pueblo Mágico, grita Don Lalo Manotas!!

*El super secretario sigue aprovechando su cargo público

*Los cambios en el gobierno de Octavio Aburto Inclán

*La diócesis de Tacámbaro ha tapado acoso sexual de sacerdotes

Sigo insistiendo que el general Eduardo Dávalos Hernández, super secretario de Turismo en el gobierno panista de Octavio Aburto Inclán, insiste en aprovechar su cargo para lanzar manotadas al pastel del presupuesto público, claro, respaldado por el propio edil tacambarense.

Lo anterior viene al caso por la reciente visita de hoteleros nacionales a Tacámbaro, casi un centenar que participaba en un congreso de Pátzcuaro y, por supuesto, la sede para recibirlos fue ¡El Mirador de Don Lalo!, inmueble que renta el generalazo Eduardo Dávalos como negociante particular.

No es malo que Don Lalito se dedique a lo que quiera, pero, en su situación de funcionario municipal de Turismo en Tacámbaro, utiliza información y palancas de primera mano para beneficiarse, aventando manotazos al presupuesto del pueblo. Don Lalo Manotas debe usar una estrategia más equitativa para impulsar el turismo en el municipio y con los actores de ese sector, pero, no; se monta en su macho de militar y nadie lo baja de él, levantando críticas de sus amigos restauranteros y hoteleros.

Eso es lógico. Don Lalo Manotas no puede ser juez y jugador en la cancha del sector turístico. Si quiere competir en igualdad de condiciones para que los turistas lleguen a su changarro, debe de renunciar a su cargo de super secretario municipal y dedicarse de lleno al negocio que tiene en ese sector, pero no se vale que aproveche la coyuntura de ser funcionario y amigo del edil Octavio Aburto Inclán para que, como no queriendo, facturar en su beneficio.

¡Don Lalo no entiende de esa situación y grita por todos los puntos cardinales de Tacámbaro que…no te acabes Pueblo Mágico!…

El presidente Octavio Aburto Inclán se lamenta que no tiene recursos para apoyar al pueblo y, contradictoriamente, contrata más y más personal en diversos departamentos, lo que implica abultar la nómina y disminuir los recursos destinados a obra pública. De igual manera, realiza cambios de funcionarios de primer nivel para enderezar el barco que da tumbos y que le podrían afectar en sus intentos de candidatearse, en su momento, por la diputación local por el distrito de Tacámbaro, compitiendo con su homóloga ariense Irma Moreno Martínez.

Por supuesto que, como ejecutivo, Octavio Aburto Inclán decide en esos enroques, pero debemos espera qué resultados arrojan al ayuntamiento y hacia la sociedad. Dicen los manuales de buena política que los cambios de forma en nada pueden servir, si no hay cambios de contenido en esa misma política…

Con las acusaciones de abuso de menores que encaran muchos religiosos católicos en diversos puntos del planeta, cabe mencionar que, aquí en Tacámbaro, también ha habido casos de acoso sexual de algunos sacerdotes en contra de seminaristas, pero que han sido tapados por el titular de la diócesis.

La ignorancia, temor, control doctrinario que realiza el clero, entre otros mecanismos, han sido fundamentales para que esas situaciones de abuso no se den a conocer a la opinión pública en la diócesis de Tacámbaro…