El nuevo hospital regional de esta ciudad se construyó en terrenos irregulares, bajo un procedimiento ilegal que “esconde intereses obscuros”, denunció el regidor perredista Crescenciano Luquín Corral.
Contó que desde la anterior administración municipal, que encabezó el priista Antonio García Velázquez, una fraccionadora “hizo una supuesta donación al ayuntamiento de un terreno para la edificación de un nosocomio de forma irregular, porque el fraccionamiento donde se encuentra el predio no estaba en regla, pues no cubría con todos los requisitos que marca la ley correspondiente”.En ese entonces, agregó, el gobierno local aceptó inexplicablemente el terreno a sabiendas de que éste se encontraba en un fraccionamiento irregular; “se hizo un convenio entre la autoridad y la donaría para regularizar los predios sin que hasta el momento se haya cumplido”, afirmó.
Luquín Corral abundó que el problema en cuestión le fue heredado a la actual administración local, cuyo cabildo, no obstante, en vez de subsanarlo, votó en sesión edilicia a favor de que el terreno donde hoy se encuentra construido el nuevo hospital regional –el cual todavía no entra en operaciones- sea donado a la Secretaría de Salud.
En la última reunión del cabildo “de un plumazo” se autorizó, por mayoría de sus miembros, ceder el predio a la referida dependencia “sin revisar la documentación para verificar que todo estuviera en regla, lo cual constituye una acción ilegal, que hace pensar que existen intereses económicos o de otro tipo en este tema”, destacó el representante popular.
Aseguró que él y otros dos regidores votaron en contra de dicha autorización, “no porque nos opongamos a que haya más y mejores servicios de salud para la población, sino porque no se puede pasar por encima de la ley, y máxime cuando hay “muchos gatos encerrados” en el esquema de donación que se ha dado en este asunto.
La Secretaría de Salud debe también dar una explicación sobre el por qué construyó un hospital en terrenos irregulares, finalizó.