El presidente Enrique Peña Nieto firmó ayer viernes el decreto de reforma constitucional en materia energética, que constituye uno de los cambios más importantes de las últimas cinco décadas en México y que ayudarán a que el país enfrente los retos del siglo XXI. A la ceremonia, realizada en Palacio Nacional, asistió el gobernador de Michoacán, Fausto Vallejo Figueroa.
“La reforma energética es un paso decisivo en favor de la Nación”, expresó el mandatario federal y sostuvo que tanto Petróleos Mexicanos (Pemex) como la Comisión Federal de Electricidad (CFE) seguirán siendo propiedad de la Nación, lo mismo que los hidrocarburos y la renta petrolera.Pemex y la CFE, agregó, se fortalecen y modernizan, serán efectivas y eficientes. Los trabajadores de estos dos pilares de la economía nacional pueden estar seguros de que sus trabajos serán salvaguardados y respetados.
Durante el acto al que acudieron senadores, diputados federales y mandatarios estatales, Peña Nieto dejó en claro que comienza una nueva historia para nuestro país, “hemos abierto las puertas de un futuro mejor para todos”.
Este año -continuó- los mexicanos hemos decidido superar mitos y tabúes para dar un gran paso hacia el futuro, pues con las reformas constitucionales “mandamos una evidente señal de que México se está transformando para bien de todos los mexicanos”.
Afirmó que la Reforma permitirá que el sector energético se abra a la inversión, a la tecnología y a la competencia, para permitir que el país cuente con más energía a menores costos.
Anunció el Fondo Mexicano del Petróleo para la Estabilización y el Desarrollo, cuya prioridad será acumular recursos para próximas generaciones y para que el país pueda hacer frente a coyunturas futuras.
Este instrumento financiero, dijo, recibirá, administrará y distribuirá los recursos de la renta petrolera, a través del financiamiento en ciencia, tecnología, infraestructura, becas, energía renovable y un sistema de pensiones.
En su intervención, el presidente hizo un público agradecimiento a los diputados federales, a los senadores y a los legisladores locales, por haber demostrado que sí se pude transformar a México en democracia y se pueden hacer cambios de fondo por la vía institucional.
El gobernador de Michoacán, Fausto Vallejo Figueroa, fue testigo de la trascendental ceremonia celebrada la tarde de este viernes en la sede del Poder Ejecutivo de la Nación. El mandatario michoacano ocupó uno de los lugares de honor en el recinto y estuvo acompañado por el mandatario del Estado de México, Eruviel Ávila Villegas.
Vallejo Figueroa enfatizó que el presidente Peña Nieto cumple con su compromiso de hacer realidad las reformas estructurales que México requiere para su desarrollo y la generación de fuentes de ocupación.
Previo a la intervención de Enrique Peña Nieto, hicieron uso de la palabra los presidentes del Senado de la República, Raúl Cervantes Andrade, y de la Cámara de Diputados, Ricardo Anaya Cortés.
Cervantes Andrade dijo que la revisión de un nuevo paradigma constitucional es el más importante que se ha vivido en las últimas décadas y que tiene cinco principios, financiar al desarrollo; la seguridad energética; la eficiencia energética; el interés público y la diversificación del riesgo.
En tanto Anaya Cortés festejó que haya un entendimiento entre poderes, no obstrucción ni subordinación, que se ha reflejado en las reformas de Telecomunicaciones, Educativa, Financiera, Político Electoral y Energética; “vienen tiempos mejores porque el futuro les pertenece a los que se atreven a cambiar”, sostuvo.