Lic. Alfredo Castañeda Flores
Se dice, y se dice bien, que para alcanzar la madurez como ser humano se necesita conocerse a sí mismo, porque quien no se conoce ni él, no puede alcanzar la plenitud que muchos seres humanos pretenden alcanzar, con la edad, por su experiencia, por su conocimiento, por su calidad de una mejor vida.
Concretamente, el mexicano tiene innumerables defectos, pero principalmente antivalores, esto da como resultado la descomposición del tejido social que estamos viviendo en estos días.
La gente gasta más de lo que gana. Este es un gran defecto, porque propicia que la mayoría esté todo el tiempo endeudada, que incluso mueran sin haber liquidado por completo sus deudas con instituciones bancarias, tiendas departamentales, familia, amigos, vecinos, compañeros de trabajo, y/o cualquier gente que tuvo la mala fortuna de encontrarlos cuando necesitaban dinero. El nacional no está acostumbrado a pagar, de ahí el dicho de la filosofía popular: músico pagado, toca mal son.
El individuo está acostumbrado a dar un mínimo esfuerzo en lo que hace para otros, incluyendo su empleo, no da más de lo que le piden, aunque se dé cuenta que hay más cosas que debe hacer, pero si no le dicen lo que debe hacer, no lo hace. Y, la mayoría de ocasiones, lo hace mal. Esto da como resultado productos y servicios pésimos, muy por debajo de las normas oficiales y estándares de calidad.
El mexicano es bueno para el chisme, le encanta enterarse y, lo que es peor, crearlo; a cada rato, está intrigando contra todos, es el clásico que todo lo que otros hacen está mal y solo lo que cada uno hace está bien. (Actualmente así tenemos un presidente de la República). Eso es retroceso, porque en todo hay un equilibrio, aunque sea un mínimo porcentaje, pero existe la dualidad. No todo es bueno, mucho menos no todo es malo. Asimismo, cuando surgen las noticias bomba, que en realidad son distractores del gobierno para no darnos cuenta de lo importante, empiezan a sacar los llamados memes en las redes sociales, que ahora hasta en la televisión reproducen y con esto pierden tiempo y su memoria corta (otro antivalor) se les olvida lo que antes les afectó.
La educación está cada día peor, un poco por los gobiernos que han hecho reformas que retroceden lo ganado, otro tanto por la falta de compromiso de los docentes, que solo les interesa ganar bien y no responsabilizarse; los padres que ya no se preocupan por sus hijos, los dejan solos, les compran aparatos tecnológicos para que no los molesten, ni se enojen con ellos; esto propicia nuevas generaciones de estudiantes que no les gusta estudiar, que están en las aulas solo de cuerpo, porque su mente anda divagando pensando en el celular (cuando no les permiten tenerlo) o de plano usándolo cuando se les permite tenerlo con ellos en clase. Estudiar es un compromiso que actualmente pocos, poquísimos, cumplen. La mayoría quiere egresar sin saber y eso es retroceso y perjudicial para el país.
Otra cosa que abunda y con facilidad se obtiene, es el alcohol y las cada vez, en más variedad, drogas, las hay para cualquier bolsillo, edad y estrato social. Claro que esto siempre ha existido (en menor cantidad), pero actualmente, hay más mentes débiles, enfermas, que caen con facilidad en estos infiernos, de los que pocos salen, pero no completamente sanos, siempre tienen secuelas irreversibles y progresivas.
Estudios recientes, que pocos leemos, porque este es otro defecto mexicano, la falta de interés por las cosas importantes, reales, que nos ayudan a ser mejores cada día, señalan que 4 de cada 5 individuos en el país, tienen un alto nivel de estupidez, al realizar sus conductas diarias, suena escalofriante, pero lo podemos observar a nuestro alrededor, pero principalmente en la situación que vivimos como país, si fuera falso, México, fuera un país con riqueza y algo más.
Aunado a esto, estudios señalan que 7 de cada 10 individuos, tienen problemas sicológicos, que van desde los leves hasta los graves. ¿Imagínate, inteligente lector, que ocurre cuando ambas condiciones recaen en la misma persona? Da como resultado, seres humanos muy enfermos. ¿Lo dudas?, detente un momento a analizarte primero tú, analiza a los que viven contigo, si eres observador, pero principalmente, objetivo, sabrás que no hace falta mucho para darte cuenta cuando alguien es un perfecto idiota, desde simplezas como ponerle pasta dental al cepillo, acomodar el rollo de papel de baño, colocar los ganchos en el ropero, armario o closet, etc.
El mexicano no sabe pedir las cosas, porque no las conoce, no sabe para qué sirven, ni como se usan, estoy hablando de lo más elemental, no distingue entre un seguro y un alfiler, entre ancho y grueso, angosto y delgado, no sabe ni cuantos días trae cada mes del año, estos no cambian, salvo febrero cada cuatro años que son 29 días, cada año es lo mismo, preguntan ¿cuántos días trae X mes?, vamos es algo básico, desde la primaria lo aprendimos, no conoce los colores, no sabe que excepto blanco y negro, todos los demás tienen variantes, sin embargo buscan algo azul, ¿pero?
Azul que andan pidiendo la esa para el ese, y lo que es peor, cuando se les corrige, se molestan. No están acostumbrados a reconocer sus errores, sus defectos. Vivimos en un país con una sociedad que carece del mayor valor que se debe tener, la verdad, aquí decir la verdad es más perjudicial que la mentira, se asustan cuando se topan con gente que si tiene el valor de decir un contundente SI o NO a sus preguntas y peticiones. Están acostumbrados a rogar, a causar lástima y mucha gente con esto, cambia su respuesta y les concede sus pretensiones, aunque muchas veces sean malsanas. Sin embargo, hay gente que no les cree, y éstos, son los malos, los groseros, los déspotas, los peores, porque no caen en sus trampas de mentiras.
Como en anteriores entregas, hoy lo repito, la vida cotidiana, y nuestra salud mejoraría, si hiciéramos las cosas lo más correctamente posible, repitiendo, con orgullo y sin temor de nada, ESTE SOY YO. Pero nos da miedo el qué dirán y quedar mal con y ante los demás, por lo que seguiremos siendo simplemente mexicanos.