Lic. Alfredo Castañeda Flores ANALISTA
25 MARZO 2023.-La mayoría de la gente pambolera lo duda, cree ciegamente que cualquier partido oficial de futbol del torneo que sea es honesto, que tiene que ver, con la técnica y destreza de los 11 jugadores que integran determinado equipo o selección nacional de que se trate. Pero la realidad, dista mucho de que así sea.
El futbol es el deporte más popular del mundo, por lo mismo, es el que más dinero representa para los dueños, empresarios, federativos locales, mundiales, medios de comunicación (Televisoras, radio, redes sociales), patrocinadores, y por supuesto para los propios jugadores, que son la parte principal de este espectáculo.
Así es, amable lector, el futbol es un espectáculo, y como tal debe verse, no es válido, aunque muchos lo hagan, que se vea como algo que tiene honestidad, lealtad y fortuna de momento. Porque entonces eso se convierte en fanatismo ignorante. Asistir a cualquier estadio sirve para conocer a las figuras mediáticas del momento, esas que inflan y desinflan a conveniencia, los medios de comunicación, esas que nos hacen creer que son algo fuera de este mundo, que pueden ganar campeonatos locales y/o mundiales. Y que curiosamente, en el caso mexicano, cuando se llega a los mundiales, no pasa nada.
Lo mismo ocurre cuando los vemos por la televisión, si no hay otra opción, hay que verlos por la caja idiota, esa que manipula a diestra y siniestra a los espectadores, pero sin apasionamientos ni creencias tontas de que sucederá un milagro y ganará el equipo favorito de cada quien. Eso, no existe, algunas veces coincidirá porque de dos que contienden, uno puede ganar, empatar o perder, son las únicas opciones posibles, pero no porque le prendas una veladora, vayas a la iglesia de tu preferencia a cumplir una manda, etcétera.
Como dije de inicio, el futbol es un negocio, aquel que crea que es un juego y cualquiera puede ganar, como ya lo dije, es un ingenuo soñador, todos hemos y conocemos, incluso hasta alguno de ustedes lo haya sido, un buen practicante del deporte de las patadas, pero que jamás tuvo la fortuna de llegar a jugarlo profesionalmente. Y la principal razón fue por la falta de recursos propios o a través de un poderoso patrocinador. No tengo la menor duda de que en los llanos haya alguna joya del balompié, que sea mejor que las estrellitas que nos venden los medios, pero desafortunadamente, carece de dinero.
Sí, inteligente lector, para comenzar a mostrarte, tienes que pagar, ya después, si les funcionas, vendrán los tiempos de vacas gordas, el dinero a manos llenas, los jugosos contratos y salidas a jugar al extranjero, pero de inicio, no. Se tiene que comenzar con el conocido proceso de formación, ese que no es otra cosa que irles lavando el cerebro poco a poco, para darse cuenta, los directivos de X o Y equipo o federación, que determinado jugador se prestará a los tejes y manejes que están acostumbrados a hacer, que no soltará la lengua a la primera decepción o forzamiento a perder cierto partido o hasta campeonato. Esa es la principal razón por la que los jugadores profesionales de futbol, ganan tan bien, porque en ese salario, va implícito el silencio que deben guardar todo el tiempo, aun cuando ya estén retirados.
Sin ir muy lejos, nuestro torneo local, la mayor cantidad de extranjeros que hay en los equipos de la primera división, y ahora en la llamada liga de expansión, que antes era la segunda división, son argentinos, esa nacionalidad que no es que sean mejores que los mexicanos, aunque ellos se creen los mejores del mundo, es porque al ser un país pobre, buscan oportunidades en cualquier torneo de futbol, donde les brinden un salario mejor que el que pueden tener en su propio país. Ya nacen con eso en su ADN, el de callarse y ganar dinero, cosa que otras nacionalidades no tienen tan reafirmado.
Alguna vez, inteligente lector, te has puesto a pensar, ¿por qué contra el equipo más fuerte, el equipo al que apoyas, le gana y a la siguiente fecha, pierde con el peor del torneo?, porque todo se hace meticulosamente, cada torneo se diseña para que pocos se den cuenta de la trampa, que normalmente son los comentaristas o cronistas deportivos, pero que también les conviene callarse, porque ganan sueldos muy altos, tienen reflectores y fama que no les gustaría perder.
Si alguna vez has asistido a un partido, en el estadio que sea, para ver un juego en vivo, te darás cuenta que es muy diferente verlo así, que cuando lo haces por televisión, eso es porque las cámaras están colocadas estratégicamente para que se vean jugadas que en la realidad no son así, además de que la tecnología ayuda mucho para simular un partido grandioso, versallesco (parafraseando al perro Bermúdez). Cuando estás en el estadio, te das cuenta que las jugadas son planeadas para dar espectáculo a todos los lados del estadio, para que todos los aficionados asistentes tengan las jugadas cerca de su asiento.
Son los llamados cambios de juego, y eso, es lo que hacen los estrategas o directores técnicos, obligar a sus jugadores a que aunque tengan la oportunidad de anotar un gol, envíen el balón, al otro extremo de la cancha. Ellos no juegan como en el llano, como en tu barrio, como tu jugaste o juegas, esos si son partidos donde gana la maña y fuerza de un equipo, y si ya encontraste la olla (como decíamos a la zona donde había un jugador malo del equipo contrario) todas las jugadas iban a desarrollarse por ese lado y no importaba la cantidad de goles que fueran anotados. Un partido profesional, es tan distinto. Porque tienen que dar espectáculo, para que la gente, haya o no goles, salga contenta. El que ganará ya lo tienen decidido desde antes de empezar.
Esto es algo que muchos se niegan a creer, porque luego dicen, los jugadores no tienen la culpa, o fulano o zutano, jugó como nunca, claro que eso sucede, porque cuando tu sabes que pase lo que pase, tu ganarás, sales motivado, con ganas y hasta las jugadas de fantasía te salen, porque a fuerza vas a ganar, y si no ahí están los penales, que la mayoría resultan polémicos y dudosos, sin embargo se marcan.
Recientemente, a nivel mundial, está el escándalo del equipo español Barcelona, que durante muchos años, pagó muchos millones a los árbitros locales y de la UEFA, organismo rector de Europa de este deporte, para verse favorecidos, y por ende, el más lo fue el argentino Lionel Messi, que para algunos es el mejor jugador del mundo, por lo menos eso creen sus paisanos, porque ellos se creen el centro del universo. Como lo indiqué antes, si tu sabes que vas a ganar, sales con ganas, a divertirte en los partidos porque hasta la peor jugada que hagas, puede convertirse en gol, porque ya tienes al arbitraje a tu favor, y si no, ahí están los penales. Como sucedió en el mundial, cuantos penales a favor le marcaron para que alzaran su tercera copa mundial.
Este tema es de nunca acabar, lo que es real es que ningún partido, torneo o campeonato es legal, todos están perfectamente ideados para que gane el que en ese momento tiene que ganar. Finalmente te pregunto, Argentina, cuyos habitantes tan mal hablan de nuestro país, aunque muchos estén comiendo gracias a México, tiene aproximadamente cuarenta y cinco millones de habitantes, nosotros prácticamente los triplicamos en población, ¿en verdad, en el llano, hay mejores jugadores que los mexicanos? No lo creo, solo que quizás ellos no tienen tantas trabas para sobresalir profesionalmente, porque ya tienen la fama de que juegan bien al futbol, ¿Pero es verdad? Es mi duda razonable. Ánimo.