5 febrero, 2025
ROTATIVO DIGITAL

El final de la zafra en el Ingenio de Pedernales marca también el inicio de los sueños de sus trabajadores hacia el porvenir…

Lic. Pedro Gómez Ayala        CRONISTA LOCAL

7 abril 2024.-La temporada de trabajo en el ingenio azucarero de Pedernales ha terminado. Con ello culminan también los anhelos de muchos. El ritmo de la fábrica ciñe sobre sus hombros al de la comunidad. El ruido de sus instalaciones, el humo de sus chacuacos, el inmenso olor a miel y la caída de tizne, nos muestran el modelo perfecto de una actividad cuyo legado asciende a más de tres siglos. Los camioneros, orgullosos de concluir una temporada más, se llenan de júbilo al tocar el claxon de sus vehículos que se escuchan por todo el pueblo, acción con la que se  anuncia el final de la zafra.

La diversión y la algarabía se desatan al celebrarse la fiesta del Combate. La ardua labor realizada durante todo este periodo justifica el consumo, a veces desmedido, del alcohol y de la glotonería. El jaripeo culmina, a la manera tradicional, con dicha celebración. Nuestros antepasados nos recuerdan que en sus tiempos el Jaripeo duraba hasta una semana, y que además se podía ingresar a él de manera gratuita.

Al concluir con los festejos comienza la sensatez. Se llega la hora de continuar. Hay que salir a trabajar a las parcelas. Abonar, abrir surcos y regar, se convierten en las principales tareas a realizar para que la caña quede impecable para la próxima temporada. Parece, más bien, un ciclo que se repite año tras año. A partir de aquí, los sueños se reinician. Vuelve la esperanza. La idea de un futuro mejor, se impregna en la mente de sus trabajadores.

El porvenir no es algo que está escrito. Las acciones de hoy cambiarán las situaciones del mañana. Mientras la fábrica siga en funcionamiento, entre los habitantes de la tenencia de Pedernales, Michoacán, persistirá la idea de avanzar hacia un futuro mejor.

ROTATIVODIGITAL.COM.MX