El campo en la región continúa abandonado y descapitalizado; “los campesinos se han visto orillados a vender sus tierras y buscar otras opciones de supervivencia”, sostuvo Gonzalo Miranda, dirigente municipal de la organización priista la Vieja Guardia Agrarista.
Aseguró que los apoyos que reciben los labriegos de los programas del gobierno federal -como 70 y más y Oportunidades- son “claramente insuficientes” para resolver la problemática por la que atraviesa el campo en la región de Pátzcuaro.La situación se agudiza, agregó, “si tomamos en cuenta que actualmente no existen por parte de las instancias gubernamentales programas de financiamiento accesibles para que el campesinado tenga la posibilidad de capitalizarse”.
“Vemos que cada vez más campesinos se emplean como albañiles, carpinteros, entre otros oficios, para aliviar la difícil situación económica en la que se encuentran”, señaló el líder campesino. Remarcó que durante los últimos meses los apoyos de las dependencias gubernamentales ligadas al sector campesino “simplemente no bajan, están atorados”.
Por ello, dijo, “actualmente los trabajadores del campo ya no creen en las instituciones de gobierno; ya son muchos años que no reciben los apoyos necesarios para garantizar su sustento económico por medio de las labores agrícolas”.
El dirigente de la organización, que pertenece a la Confederación Nacional Campesina (CNC), manifestó que conseguir la tierra implicó “esfuerzos y mucha sangre y ahora vemos que los labriegos se deshacen fácilmente de ella por falta de dinero”.
Se advierte, remarcó, un proceso de acaparamiento de tierras, un regreso de la concentración de éstas en pocas manos “donde los que están saliendo ganando son gente adinerada que se aprovecha de las necesidades de los campesinos”.
Sin precisar cifras, Gonzalo Miranda indicó que la “mayoría de los campesinos de la región viven en condiciones críticas”, obligándolos a buscar opciones de sobrevivencia, como la venta de parcelas, la cual ha ido en aumento durante los últimos años, puntualizó.