Aproximadamente 2 mil mujeres de diferentes edades fueron atendidas en el módulo instalado en la Plaza San Francisco, en Pátzcuaro, para realizarse el estudio de mastografía, con el fin de detectar de manera oportuna el cáncer de mama.
Al respecto, Oscar López Sierra, encargado del módulo, manifestó que desde el pasado 4 de diciembre que fue instalado el módulo móvil en el lugar antes descrito, un promedio de entre 80 y 85 mujeres fueron atendidas para realizarse dicho estudio y aunque la presencia de mujeres fue mayor a la esperada, solo ese número de fichas fueron repartidas para el estudio y donde el resultado será entregado en el Hospital Vista del Lago, ubicado en la colonia del mismo nombre.
Al decir de López Sierra, debido al alto número de mujeres solicitantes y que no alcanzaron ficha en esta primera etapa, la cual termina este miércoles 30, se espera que en enero próximo se reanude el servicio que es totalmente gratuito, ya que la Secretaría de Salud en el Estado está preocupada por el alto índice de este tipo de cáncer en las mujeres y de ahí que se haya iniciado esta campaña gratuita para detectar o provenir este mal y disminuir el número de casos.
De acuerdo a la ciencia médica, la mastografía es un estudio de Rayos X o radiografía de los senos en el que se toma una serie de placas que son interpretadas por un médico radiólogo. Se le denomina también mamografía. Debe realizarse siempre en un mastógrafo y es recomendable que se lo efectúen cada año las mujeres a partir de los 40 años.
El autoexamen es útil para detectar formaciones extrañas (bolitas), secreción por el pezón y en general cualquier cambio en el área interna y externa del seno que pudiera suponer la aparición de un tumor canceroso, pero es importante saber que es una herramienta con limitaciones. Para que el médico pueda detectar un nódulo o “bolita” es necesario que éste tenga al menos un diámetro de un centímetro. Los nódulos de menor tamaño son prácticamente imposibles de detectar a través del tacto. La mastografía detecta con claridad formaciones extrañas de tan sólo 1 milímetro de diámetro, es decir, del tamaño de una arenilla, lo cual resulta imposible para el auto examen.
De ahí que las mujeres deben acudir a realizarse dicho estudio, aunque también se recomienda la auto exploración, pero como se dijo anteriormente, algún nódulo pequeño que no puede detectarse con la auto exploración, puede ser riesgoso con el tiempo y por eso se requiere realizarse la mastografía y aprovechar el servicio gratuito que ofrece la Secretaría de Salud.