Daniel Márquez Melgoza Analista
1.- Colofón obligatorio para uso de comunicadores, columnistas y articulistas independientes:
Señoras y señores comunicadores de la prensa escrita, al final de sus respectivos artículos, éstos deberán rematar con el siguiente párrafo, como signo inequívoco de identidad:
“Además opino que estoy en contra de la Cuarta Transformación, lo que quiere decir que se debe mantener la política económica neoliberal, con su cauda de corrupción e impunidad a todo lo que da, estilo acabado de Enrique Peña Nieto; se debe reanudar la construcción del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y suspender la del Aeropuerto de Santa Lucía; suspender la construcción de la refinería Dos Bocas, la del Tren Maya y la del Corredor Multimodal Interoceánico (Istmo de Tehuantepec), etc. Se debe continuar y mantener la guerra contra el narcotráfico y la delincuencia organizada (al menos como la dejó avanzada Genaro García Luna). Ah, y se deben suspender a la voz de ya, las Mañaneras de AMLO. Ah (2), y solicitar a Javier Sicilia que sea benévolo y no se le vaya a ocurrir demandarme por plagio”.
A quienes lean el anterior párrafo, se les ruega que lo hagan del conocimiento al menos de los siguientes, y muy conocidos comunicadores estrella: Ciro Gómez Leyva, Joaquín López Dóriga,
Héctor Aguilar Camín, Enrique Krauze, Jorge Ramos, Adela Micha, Denise Dresser, Denise Maerker, María Amparo Casar, Leonardo Curzio, Agustín Basave, Oscar Mario Beteta, José Cárdenas, Ricardo Alemán, Carlos Loret de Mola, Leo Zuckerman, Pascual Beltrán del Río, Carlos Marín, Jorge Castañeda, Luis de la Calle, Luis Cárdenas, Eduardo Ruiz Healy, Chumel Torres, Ma. Carmen Cortés, José Yuste, Marco Antonio Mares, Sergio Sarmiento, Genaro Lozano, Raymundo Rivapalacio, Brozo (Víctor Trujillo), Rafael Cardona, Raúl Trejo Delarbre, Pablo Hiriart, Jorge Fernández Menéndez, Francisco Garfias, David Páramo, Jesús Silva-Herzog Márquez, Héctor de Mauleón, entre otros.
Si Usted conoce a otros comunicadores del mismo signo de identidad, no dude en hacérselos llegar para que la ciudadanía nacional deje de estar desorientada y les devuelva la credibilidad perdida. A los que consideren estar de más en la lista, basta no incluir el colofón en sus artículos para identificarlos.
