14 SEPT. 2023.-Hace unos días recibí por mensajería un regalo extraordinario por parte de Juan Pascoe: uno de los pocos ejemplares de La primera imprenta en Texcoco, 1596-1597 (!), recién publicado.
Escrito e impreso artesanalmente por él mismo, recopila y sobre todo amplía y propone enmiendas a la información que hay acerca de este establecimiento tipográfico, el primero que existió en América fuera de la ciudad de México.
Que el autor me haya hecho llegar este obsequio ya es suficiente motivo de alegría, pero además tengo el gusto de que mi nombre aparezca en la obra (!!), pues en algún momento Juan me preguntó mi opinión sobre la fuente con la que se imprimió el Confessionario en lengua mexicana y castellana, el cual, según su portada, fue impreso en 1599 en Santiago Tlatelolco por Melchor Ocharte, pero que él asegura que es parcialmente obra de Cornelio Adrián César en Texcoco.
Y todavía no les he dicho lo mejor: en la última hoja del libro me incluyó algo que nunca esperé: el fragmento de una hoja de dicho Confessionario (!!!). ¿Qué más podría pedir este entusiasta de las imprentas mexicanas del siglo XVI?
