“Este mundo no nos fue heredado por nuestros padres, sino que nos fue prestado por nuestros hijos”.
Soy ya 19 años de aquel artero magnicidio que conmocionó a México y a los miles de mexicanos que vimos en Luis Donaldo Colosio Murrieta al hombre que daría un mejor futuro a nuestro país, así lo sentíamos quienes lo conocimos y llegamos a intercambiar algunas palabras con él nos hacía sentir esto.El político que quiso transformar a México, que desde las entrañas mismas del PRI buscó que este estuviera más cerca de su gente a quien estaba olvidando y unos años después caería estrepitosamente, producto de sus errores al dejar por 12 años el poder en México, y que lo obligó a replantear su futuro, siempre teniendo en cuenta la ideología política de Luis Donaldo Colosio y que nuevamente se ganó la confianza del electorado en la elección del año pasado.
Su muerte representa uno de los crímenes políticos más determinantes de nuestra historia moderna y una verdadera desgracia que lamentamos los mexicanos, particularmente para el PRI. Aún se está en deuda con el legado histórico que el político sonorense dejó en su trayectoria como servidor público y en el discurso que pronunció aquel 6 de marzo de 1994 que marco para muchos el rompimiento del PRI con el Gobierno que encabezaba Carlos Salinas de Gortari y que tuvo sus consecuencias, dicen los analistas, en una de las muchas hipótesis en su asesinato.
Aquellas palabras pronunciadas hace ya 19 años siguen sonando hoy como una permanente exigencia para cumplir el compromiso de “reformar el poder”, que estableció en su plataforma de campaña. Lograr esa reforma del poder en México es el desafío más grande que hoy enfrentamos.
La muerte de Colosio despertó una conciencia no solamente para los priistas, sino para todos los sectores de nuestro país, pues Colosio destacó por su valentía y su honestidad, cualidades que lo llevaron a ser grande dentro de la política.
Así, pues, en el marco de su aniversario luctuoso, valga recordar el legado político y el pensamiento de este hombre. Su entrega y patriotismo, su lucha por los más desfavorecidos, su convicción democrática son valores que no deben perderse.
Hoy por hoy, en estos tiempos de grandes retos, vida y legado político de Colosio es más que nunca un ejemplo a seguir de un político que luchó por las causas justas, encabezando el reclamo social, siempre al lado de los habitantes de aquellas zonas económicamente más deprimidas del país.
No podemos olvidar el legado de Colosio, y aunque México en la actualidad es diferente que hace 19 años, él con sus ideas sigue vigente en la memoria colectiva de los mexicanos, que practican su ideario, su pensamiento y su amor por este país. Hoy aún queda una gran deuda con él, quien con toda claridad, en su tiempo, refirió los grandes desafíos que tiene el país, por ello es indispensable trabajar con eficacia y hacer a un lado las incapacidades, porque se tiene que trabajar a favor de México y los mexicanos.
La identidad del pensamiento de Luis Donaldo se encuentra en las siguientes propuestas: desarrollo social, regional y sustentable; reforma del poder; reforma de gobierno; competencia política; economía de la certidumbre; viabilidad de la nación en la globalización; el poder del ciudadano; sociedad de libertades y de diversidad de alternativas y la ética del ejemplo.
Y quiero cerrar mi comentario con las palabras hace algunos meses publicadas en este mismo espacio por parte de Luis Donaldo Colosio Riojas que, aún a pesar del tiempo transcurrido, pareciera que siguen igual al que veía Colosio hace casi 20 años y que dice: “Me preocupa que veo a un país olvidado por sus líderes, quienes se concentran en sacar adelante sus carreras y a sus partidos antes que a su gente. Me preocupa ver un abismo de desigualdad y diferencia, permeado todo por la infame indiferencia de quienes tienen la responsabilidad de honrar la confianza de su gente. … hasta aquí mi comentario, mi correo electrónico licsebpastrana@yahoo.com o sígueme en facebook en Sebastián Pastrana Ferreira y en twitter como sebastianpastr3