Estamos iniciando un nuevo año, en México, la gran mayoría de individuos está acostumbrada a las supersticiones, a los amuletos, talismanes, deseos, etc., y se tienen infinidad de ellos para cada circunstancia, época o situación. Por ejemplo, para el fin e inicio de año: los calzones de colores, según lo que cada quien desee, las maletas, lentejas, velas o veladoras de colores, estrenar ropa o calzado, y más.
Pero lo más raro de esto, es que lo hacen con una fe que raya en la ignorancia. Porque se obsesionan a grado tal que dejan su vida a la suerte de X o Y artilugio, y eso no tiene que ser así, porque se vuelven esclavos de eso y no pueden, incluso, salir sin determinado accesorio o vestimenta. Efectivamente, la ciencia comenta que todo ser humano tiene la urgente necesidad de creer en alguien o en algo, pero los mexicanos, para variar, exageran, porque casi todo tiene un significado especial para ellos y esto, en lugar de beneficiar, contribuye al estancamiento en todos los sentidos, pero principalmente el económico, porque dejan de producir por estar esperando milagros que jamás llegarán.
También, el inicio del año se llena de propósitos y deseos que en pocos días se olvidan, porque se proponen metas, demasiado ambiciosas, que de antemano saben los que lo hacen que son imposibles de cumplir (bajar 20 o más kg, sacar calificaciones de 10, ganar el doble o más de salario actual, etc.).
Creer en algo o en alguien está bien, pero debes creer en ti, con sinceridad, honestidad y objetividad, no se trata únicamente de desear algo, sabiendo o engañándote de que jamás lo conseguirás.
Por eso, y sin el afán de agredir a nadie, simplemente de informar y tratando de buscar que modifiques tus acciones, actitudes, quiero señalar algunas de ellas que te mantienen estancado, pero como se dice, cada quien decide si modifica o no su manera actual de ser y actuar.
El mexicano no sabe cuidar el medio ambiente, produce más y más basura, no pide, exige bolsas y más bolsas de plástico en cualquier tienda, negocio o almacén, siendo esta acción la principal contaminante del medio ambiente.
No separa la basura que produce, orgánica, inorgánica y metales. La deja en cualquier lugar, principalmente en la calle.
Tira los desechos de manteca o aceite, en el drenaje, lo que contamina aún más los casi desaparecidos ríos del país.
No se tiene la cultura del ahorro, viven al día y lo que es peor, se endeudan, por realizar fiestas o comprar productos y artículos innecesarios.
Actualmente, los bancos ofrecen las tarjetas de crédito de poca monta, pero la suficiente para que mucha gente las acepte y se estén endeudando mes con mes.
Lo mismo sucede con las tiendas departamentales, casas de ahorro y empeño, sueltan de forma indiscriminada tarjetas para comprar mercancía y/o adquirir préstamos que no se necesitan, teniendo que pagar hasta el doble de lo solicitado.
Otra acción que frena el avance económico de las personas es la adquisición de seguros que no disfrutas, pero que sí merman tu economía cada semana, quincena o mes, según el caso, porque las poquísimas veces que la gente los llega a necesitar, pagan más del famoso deducible que sin haberlo tenido. Así como también varios negocios y empresas los ofrecen, habiendo gente que tiene 3 o más similares, pero de diferente denominación o razón social, los que muchas veces, por atrasarte o dejar de pagar, pierden su vigencia.
Ahora, el actual gobierno federal, ya nos impuso a los automovilistas la obligación, este 2019, de contar con un seguro que incluya daño a terceros o de lo contrario, si no se cuenta con él, se puede imponer una multa superior a los siete mil pesos, es una clara violación a la libertad de libre tránsito. Pero principalmente a la economía personal.
Los profesionales, principalmente, los que tienen que ver con la salud del ser humano y animalitos, (médicos y veterinarios), terminan las carreras sin la preparación adecuada, provocando muchas ocasiones, “accidentes” de lamentables consecuencias (diagnósticos y operaciones equivocadas, recetas incorrectas, repeticiones inadecuadas {cuando surge un malestar nuevo, resulta que todos tienen la misma infección o enfermedad}, etc.), y eso es, primeramente, porque además de la mala preparación, son chambones y todo hacen a la carrera, no se detienen a realizar un estudio pormenorizado para descartar cualquier malestar.
En fin, el mexicano está acostumbrado a engañarse solo, pero sobre todo, a que lo engañen, no le gustan las verdades, porque muchas veces son contrarias a sus deseos o a los designios de su horóscopo o charlatanería, en los que cree ciegamente, sin detenerse a pensar que la mayoría de eso, es material y humanamente imposible. Esta es la principal razón por la que pocos, muy pocos, en verdad realizan sus propósitos de año nuevo, y México está tan estancado en muchos sentidos y aspectos. Porque los ciudadanos, mayoritariamente, no tienen el mínimo sentido común de las cosas, y contagian a los pocos que si hacen las cosas y sobretodo, llevan su vida, de la mejor manera posible. Si tú, amable lector, eres de esa inmensa mayoría, cambia, siempre se puede hacer porque es una decisión personal, si estás del otro lado, muchas felicidades, por ser diferente y no provocar que seamos un país más atrasado.
Bienvenido 2019, año que será como tú quieres que sea. La magia y los milagros solo existen en la literatura y la fantasía.