15 abril, 2025
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Autoridades federales, insensibles ante deterioro de edificio histórico en Pátzcuaro

Ante la falta de mantenimiento y la indiferencia de las autoridades correspondientes, el histórico edificio que alberga la biblioteca Gertrudis Bocanegra de Pátzcuaro continúa deteriorándose, poniendo en peligro el mural pintado por Juan O´Gorman, el cual está expuesto a las filtraciones de agua que se dan en el interior del inmueble.

Personal de dicha biblioteca deploró que, no obstante las reiteradas peticiones que se han hecho a las autoridades federales para detener las afectaciones que sufre el edificio, hasta el momento no ha habido respuesta.

Precisaron que ante la falta de mantenimiento, existen filtraciones de agua de lluvia las cuales causan goteras al interior del edificio, “con el riesgo de que se maltrate irremediablemente el material bibliográfico y el mobiliario del lugar”.

El mural de Juan O ‘Gorman -que da cuenta de la historia de Michoacán durante el mundo precolombino, la llegada de los españoles, la obra evangelizadora de Vasco de Quiroga, la Independencia y la Revolución-, también está expuesto a dicho problema.

Se trata de una pieza artística que por su dimensión (con 14 metros de altura por 12.7 metros de ancho) y colorido, constituye el atractivo principal al interior del edificio. El muralista, discípulo de Diego Rivera, comenzó a trabajar la obra en 1941 y demoró aproximadamente un año en concluirla, según fuentes consultadas en Internet.

El edificio data de 1576 y albergó al convento de los agustinos. En el año de 1938 el presidente Lázaro Cárdenas dispuso establecer en el sitio la biblioteca.

Asimismo, se informó que “hace algunos años se retiró la madera del interior de la biblioteca que protegía las pinturas religiosas que fueron pintadas cuando funcionaba como iglesia, dejando desprotegidas dichas pinturas y ahora se dañan por las inclemencias del tiempo”.

De igual manera, hace cuatro años fue rota la puerta lateral del edificio cuando algunos ladrones se introdujeron en él; “acudió personal del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) a valorar los daños, pero ya no han regresado, por lo que aún no ha sido reparada la puerta”, lamentaron los empleados del lugar.

Por otra parte, desde hace aproximadamente tres meses se ha suspendido el servicio de cómputo e Internet de la biblioteca debido a que su sistema resultó afectado por una descarga eléctrica, lo cual ha perjudicado a cientos de usuarios, principalmente a estudiantes.