El virtual presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ya empezó a cumplir sus promesas de campaña y aunque quiere hacerse el chistoso al decir que “solo deportará” a unos 3 millones de connacionales y serán aquellos que hayan cometido algún delito, ya sea de aquel lado o de este, o sea que va a mandar pura resaca de regreso y después seguirá con los chambeadores.
Además, está incluyendo en su gabinete o como se le llame de aquel lado de sus colaboradores, a puro racista que en cualquier momento estarán haciendo de las suyas contra los emigrantes ilegales y ya hasta se dio a saber a través de medios de comunicación electrónicos, que ya hasta hay “caza migrantes”, que empiezan a descargar su odio contra los mexicanos o latinos que van en busca de trabajo “al otro lado” y que por esta gente los Estados Unidos están en el lugar de privilegio que se encuentra, gracias a esa gente trabajadora y que los güeritos no pueden hacer porque se quiebran las uñas.Ojalá y a este presidente que la ha agarrado contra los mexicanos, se le olvide su odio y mejor se ponga a trabajar en lo suyo. Además que irá hacer cuando se le aparezca por ahí otro Bin Laden, u otro personaje de esos también turulato que haga temblar al país del norte con sus amenazas, ahí es donde Trump debe pensar que hacer y no gastar su pólvora en infiernitos.
Así mismo y en este caso los gobiernos de Michoacán y del municipio de Pátzcuaro, Silvano Aureoles y Víctor Manuel Báez Ceja, ya estarán pensando que hacer para recibir a los paisas que sean deportados y no precisamente para hacerles fiesta, sino para crear fuentes de empleo. Pero como yo ni soy migrante ni conozco el país del norte, mejor le cambio de hoja a este cuaderno.
Aunque faltan poco más de dos años para el proceso electoral del 2018, en el municipio ya empiezan a barajarse los nombres de quienes aspiran a un cargo de elección popular en los diferentes partidos políticos y no obstante los problemas de todo tipo que se viven en todos los ámbitos, hay quien así quiere entrarle a los cocolazos.
Para aspirantes a la presidencia municipal por el PRI en Pátzcuaro, ya se escucha el nombre de la ex titular de la mujer en el Estado y ex candidata a diputada federal en el pasado proceso electoral, ella es Samanta Flores, una mujer que algunos sectores del PRI confían en ella, después del buen resultado que obtuvo en las votaciones, aunque no le alcanzó para vencer a la actual legisladora de extracción perredista, Aracely Saucedo Reyes. Los priistas dicen que Samanta Flores bien podría ser una buena candidata al municipio, por la experiencia política que ha tenido en los cargos que ha estado, en el municipio y en el Estado. Hay más suspirantes para este cargo dentro del PRI, que bien pudiera repetir una vez más en ex dos veces presidente municipal, Antonio García Velázquez y hasta el ex regidor y líder de comerciantes, Gregorio Valencia Robles, que dice tener la experiencia y los grupos necesarios para llegar lejos en estos menesteres de la política.
Pero no se debe descartar a un joven dirigente y luchón, como le es el representante de la Organización de Colonias y Calles Unidas de Pátzcuaro, Efraín Pérez Lombera, un militante priista, que desde que asumió la dirigencia de la organización fundada por su señor padre, Guillermo Pérez Vargas, hace poco más de 37 años y donde el actual dirigente Pérez Lombera ha seguido el proyecto del desaparecido líder y que es apoyar a los sectores más vulnerables, no obstante las piedritas y piedrotas que se encuentra en su camino, el joven dirigente sería un buen prospecto del PRI.
En el PRD también hay bastante parque, pero lo que también hay y de sobra, son problemas entre la propia militancia, lo cual les está causando mucho daño, por lo que primero deben dirimir diferencias internas y después tratar de sacar un candidato que de pelea a los demás contrincantes, porque el PRD se pudiera romper y quien pudiera salir ganón, sería el partido de Morena, de López Obrador, a donde se están yendo algunos perredistas por los problemas en su partido del sol azteca; lo malo que al irse se llevan también los problemas.